Hasta el hospital Carlos Holmes Trujillo fue trasladado el recreacionista Estiven Cadavid, de 23 años. Familiares del joven, que falleció por una herida en el pecho con arma blanca, aseguraron que este se resistió al hurto de su teléfono móvil.
"Por quitarle el celular, le pagaron una puñalada. No hubo tiempo, ni siquiera, de arrimarlo a una clínica para que hicieran algo para salvarle la vida", contó Mario Cadavid, familiar de la víctima.
Al parecer, el joven caminaba por una calle de la ciudad en compañía de un menor de 14 años, cuando dos hombres lo interceptaron, lo tomaron del cuello, le pidieron el celular y, al oponerse, lo hirieron en el pecho. Autoridades investigan.
"Según manifiestan, hubo intercambio de palabras, discutieron y fue agredido con un arma blanca. En ese momento se le cayó el celular al piso e inmediatamente los agresores lo cogen y emprenden la huida", explicó el coronel Óscar Lamprea, comandante del Distrito 4 de la Policía de Cali.
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Sin embargo, agregó el oficial, no se descarta la hipótesis de que el ataque tenga relación con retaliaciones entre personas por la disputa de algún territorio.