Las personas, en su mayoría desplazados, llevaban tres meses en el predio que fue desalojado con una retroescabadora.
“No sabemos qué vamos a hacer, porque no tenemos nada”, dijo uno de los afectados.
Las autoridades dicen no saber qué pasará con las familias que perdieron sus cambuches, entre las que se encuentran niños y ancianos.