Junio, con 53 homicidios, fue uno de los meses más violentos para Medellín, en los últimos años. La cifra de asesinatos es, según el alcalde Federico Gutiérrez, la respuesta a su ofensiva contra el crimen organizado.
“Sacudir ese palo tiene unas implicaciones y esas implicaciones las tenemos claras(...) no vamos a ceder cuando se dice aumentan más los homicidas o el hurto, bueno, pues tiene que haber algún punto de quiebre y tiene que ser diciendo no más a estructuras criminales”, afirma Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín.
A estas alturas, Medellín registra una de las tasas de homicidios más altas del país con 258 muertes violentas, un 10% más que el año pasado. Más de la mitad de estos muertos, según las autoridades, eran miembros de bandas delincuenciales.
“Aproximadamente el 50% de los homicidios en Medellín se producen por enfrentamiento de estructuras de crimen organizado, siguen enfrentados en diferentes zonas de la ciudad”, asegura Gutiérrez.
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Sectores como Castilla, en el occidente y la Candelaria, en el centro de la ciudad, concentran la atención de la Policía. Allí, se ha redoblado su presencia y son las comunas que más registran muertes violentas.