Estafador vendía supuestamente taxis que no eran de su propiedad

El cabecilla de una banda, contra la que existen 45 denuncias por estafa, fue capturado por la Policía luego de que agentes encubiertos se hicieran pasar por compradores de un taxi que era ofrecido a través de avisos clasificados.

La banda operaba desde antes del 2012 cuando llegaron las primeras denuncias de propietarios y compradores de vehículos. Los delincuentes se hacían pasar como conductores de taxis con amplia experiencia, mediante la presentación de documentos de identidad falsos, eran contratados para la conducción de vehículos de servicio público.

Después de ser contratados, falsificaban los documentos de los vehículos para hacerlos aparecer a su nombre y los ofrecían en venta a través de avisos clasificados en periódicos de circulación nacional y local. Los interesados contactaban a los falsos propietarios para conocer el automóvil de su interés y después de acordar el precio de la negociación, acudían a una notaría donde firmaban una promesa de compraventa y pagaban a los delincuentes el precio acordado.

Cuando el comprador llegaba a la Secretaría de Movilidad para realizar el traspaso de propiedad del taxi, se encontraba con que éste pertenecía a otra persona diferente a la que se lo vendió y descubría que había sido estafado.

Los investigadores policiales, luego de conocer las denuncias, lograron la captura de cuatro integrantes de la banda de estafadores, quedando pendiente la detención de su cabecilla.

Alias “el mono” fue capturado en el centro de Medellín, luego de haber evitado su detención junto a sus cuatro cómplices en 2012. A pesar de verse descubierto, “el mono” intentó eludir nuevamente su captura, presentando a las autoridades documentos de identidad falsos.

Alias “el mono” fue dejado a disposición de autoridad judicial competente, ya que tiene en su contra orden de captura por los delitos de concierto para delinquir, falsedad material en documento público y falsedad en documento privado y posee una sentencia condenatoria de 80 meses de prisión.