Este increíble caso ocurre en Rionegro. Su nombre es Luis Felipe Ocampo y está reportado ante varias centrales de riesgo.
Según sus propias investigaciones, todos los fraudes que se han hecho a su nombre, como préstamos bancarios y planes telefónicos, se están haciendo en Cartagena.
“Hace un año comenzó todo. Empecé a recibir llamadas de estas entidades diciéndome que estaba en mora. Yo nunca le he servido de fiador a nadie. De hecho no conozco Cartagena”, afirma Luis Felipe, tecnólogo en construcciones civiles.
A su nombre sacaron dos créditos por valor de $26 millones, un celular y un plan de voz y datos de dos millones y electrodomésticos a crédito.
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A esto se suma que la huella que aparece en el cédula falsa no coincide con la suya.
Según la Registraduría Nacional, solo cuatro entidades bancarias tiene permiso para verificar a través de biométrico la identidad de sus usuarios.
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Esta situación ha frustrado a Luis Felipe Ocampo de tener casa propia.