Durante el forcejeo, en La Unión Peneya, se escucharon disparos. Mientras pobladores denuncian agresiones de uniformados, Ejército señala lo contrario.
Los enfrentamientos se iniciaron cuando un grupo de campesinos se opuso a la erradicación de los cultivos de coca.
“Hubo confrontaciones con algunos campesinos que se oponen a la erradicación forzada y pues fueron agredidos por la fuerza militar. Hubo disparos que, por fortuna, no dejaron heridos ni víctimas que lamentar”, dijo Rigo Abello, vocero de los campesinos.
Organizaciones campesinas denunciaron y pidieron apoyo de la Defensoría del Pueblo.
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“En este momento donde todos estamos enfrentando esta pandemia, cesemos las hostilidades, respetemos el llamado del Gobierno Nacional de mantenernos cuarentena”, pidió Abello.
Tras los disturbios, el Ejército emitió un comunicado en el que señaló que los soldados fueron agredidos por los campesinos, “con armas blancas y maquinaria agrícola” y anunció la apertura de una investigación.
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