El detenido, que purga una pena de 5 años, dice que no funciona y ha llamado a las autoridades desde hace varios meses, pero nadie lo ha visitado.
“Mi único interés en salir de mi problema bien y no que vayan a pensar que uno está dañándolos o delinquiendo”, afirmó el hombre.
Matilde Mendieta, directora de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios, se refirió a las denuncias sobre problemas con los brazaletes electrónicos.
“Como en todo hay fallas electrónicas y, si hay falla electrónica, hay un protocolo. El brazalete debe ir a un laboratorio para lo cual se requiere que la guardia del Inpec vaya a donde la persona privada de la libertad. Si no se puede arreglar, se cambia”, aseguró.
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Este detenido, incluso, espera que lo visiten pronto para que le retiren el dispositivo pues asegura que ya cumplió su pena de prisión y debe salir a trabajar.
En contexto:Más de 3.000 presos que portan brazalete electrónico están sin monitoreo, según sindicato del Inpec