Delincuentes le inyectaron en la raíz una sustancia química. Hay indignación entre la comunidad. Expertos intentan salvarlo.
El árbol había sido sembrado por el papa Francisco, el 8 de septiembre de 2017, durante la visita que realizó a la capital del Meta.
El macizo permanece en cuarentena, mientras fieles esperan que obre un milagro y “reviva”.
Publicidad
En contexto:
Francisco hace un minuto de silencio por víctimas del conflicto y siembra árbol como símbolo de paz