El asesor de Paz de Cali, Felipe Montoya, informó que 138 personas que hacen parte de 38 familias de la comunidad indígena Wounaan nonam, se encuentran asentadas en Cali. Esta cifra fue establecida luego de un censo realizado entre el 30 y 31 de marzo pasado.
“Al visitar vivienda por vivienda en los cuatro sectores donde residen los indígenas: Altos de Menga, Siloé, Piloto y Sucre, evidenciamos que hay familias asentadas en Cali desde 2008”, dijo el funcionario.
Según Montoya, a esta comunidad se le ha brindado ayuda humanitaria, kit de alimentación y entrega de bonos, así como jornadas de salud y el acompañamiento al proceso de traslado de la sus miembros a Mallamas, la EPS que atiende a esta población indígena.
“Una vez se identifiquen los líderes de la comunidad y se establezca el número de familias que van a permanecer en Cali, se realizará el plan de reubicación con la Unidad de Víctimas. Tenemos información de 6 familias que quieren retornar nuevamente a su territorio. Una vez se den las condiciones de seguridad y de habitabilidad, ellos serían incluidos en el gran plan de retorno que realiza la Unidad de Víctimas con más de 600 wounaan nonam que están en Buenaventura”, explicó el Asesor de Paz.
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Acción de tutela
Una tutela instaurada por ocho familias que llegaron en enero del 2015 a la ciudad desplazadas de cabildo de Puerto Guadualito del Resguardo de Puerto Pizarro se afirma que la Asesoría de Paz no les ha brindado la atención necesaria.
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Al respecto, Montoya señaló que el Municipio ha estado trabajando con esta comunidad y brindándoles ayuda, no solo en educación, sino en salud y cultura, además de articularse con la Cruz Roja, el ICBF y la Unidad de Víctimas.
“Las 8 familias accionantes del pueblo wounaan nonam se encuentran incluidas en el Registro Único de Víctimas, RUV. Está ayuda se enmarca en el artículo 94 del Decreto 4633 de 2011 a favor de los accionantes y que la responsabilidad de esta ayuda es de la Unidad de Víctimas”, dijo.
El funcionario explicó que, antes de ser incluidas en el RUV, el Municipio acordó con estas familias el tipo de ayuda humanitaria que recibirían. En ese sentido, la población decidió que se les entregará bonos. “Estas entregas se hicieron dos veces, tiempo que demoró la inclusión en el Registro Único de Víctimas”.
“Como Municipio, se gestionó con el Comité Internacional de La Cruz Roja (CICR) y esta entidad brindó ayuda monetaria para el pago de su arriendo, entregando $400.000 por cada familia. Estas entregas se hicieron dos veces”, puntualizó.
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