Se trata de un pez pelícano cuya boca se infla para atrapar grandes presas. Fue captada en las profundidades del mar de Hawái
A más de mil metros se puede ver este tipo de animales, que también pueden ampliar su estómago para digerir sus presas.
Lo sublime del momento es ver cómo abre las fauces y aparenta ser una bola con una cola puntuda. Después de desplegarse se ve cómo en cuestión de segundos retrae el cuerpo y queda convertida finalmente en una especie de anguila.
Científicos dicen que se trata de un espécimen joven, pues los adultos pueden llegar a medir un metro de longitud.