El hombre de 80 años fue encontrado desorientado por un supervisor de vuelos, en el aeropuerto de Denver.
La increíble situación se vivió en un viaje de Florida rumbo a Denver, en Estados Unidos, cuando la hija de Jerry Ellingsen decidió subirlo al avión junto a su perro con la única intención de deshacerse de él.
Durante todo el vuelo, según el medio local 9News, Ellingsen les hacía preguntas insólitas a las azafatas y cuando llegó al destino se perdió por completo.
El anciano preguntaba dónde estaba y qué hacía allí. Tras pasar horas deambulando, las autoridades se percataron de su presencia.
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La policía de Denver, tratando de investigar la procedencia del anciano, descubrió que su hija lo había abandonado, no sin antes decirle a las azafatas del vuelo que “estaba harta de su padre” y que “no quería volver a saber nada, ni que se pusieran en contacto con ella por temas de su padre”.
Las investigaciones revelaron que la hija escribió a la segunda esposa de su papá para que lo recogiera en el aeropuerto de Denver y se hiciera cargo de él, pero esta nunca fue y cuando la interrogaron afirmó que no quería “ocuparse” del señor.
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