Pareja finge nacimiento y muerte de su “bebé” para recolectar dinero

Geoffrey y Kaycee Lang pidieron auxilio a familiares y amigos para costear la llegada de su supuesto hijo.
El hecho tuvo lugar en Pensilvania, Estados Unidos, donde los esposos tuvieron que rendir cuentas a la Policía estatal por fingir el nacimiento y muerte de su “bebé”, acontecimiento que tenía como fin recolectar dinero y obsequios entre familiares y amigos.
Conforme a lo explicado en el medio WTA-TV Pittsburgh, la pareja fingió el embarazo de su primer hijo. La mentira llegó a tal punto de publicar en redes sociales fotos de la supuesta barriga en crecimiento, hasta la realización de un ‘baby shower’, evento en el que lograron recolectar buenas sumas de dinero.
Llegó julio, mes en que le darían la bienvenida al niño. La publicación de fotos de Kaycee en el hospital junto a Geoffrey daba señales a familiares y amigos de que el pequeño estaba a pocos instantes de llegar al mundo, sin embargo, horas después la pareja dijo que había muerto.
Una tragedia total, pensaron sus más allegados. Pero la codicia de la pareja continuó y aprovecharon la supuesta tragedia para pedir más recursos, inclusive a través de la plataforma GoFundMe, donde recolectaron más de 600 dólares. Esta suma, iba a ser invertida en el supuesto funeral de ‘Easton’, como se llamaría el descendiente.
Ningún familiar ni allegado presenció el comunicado entierro de ‘Easton’. A pesar de haber recibido el anuncio fúnebre, la pareja les confirmó a sus familiares y amigos que el bebé había sido cremado.
Este hecho le causó curiosidad a Cynthia Dilasco, amiga cercana de Geoffrey y Kaycee, quien optó por comprobar a través de sus propios medios la sospecha que le venía a la mente después de lo relatado por ambos. Cynthia llegó a la funeraria para averiguar por el bebé fallecido, 
con la sorpresa de la inexistencia de algún “Easton Lang” en sus registros de defunción.
Inmediatamente Dilasco informó a las autoridades del hallazgo encontrado, generando al instante la intervención de la Policía local con una orden de allanamiento a la casa Lang, donde obtuvieron evidencia que terminó de sentenciar a la pareja; una muñeca sustituía al recién nacido junto a una urna personalizada con el nombre de “Easton Lang”.
Del mismo modo, llegaron al hospital, donde no se tenía conocimiento de la existencia del feto nacido-muerto en los registros forenses, lo que terminó de concluir la mentira de la pareja que ahora afronta cargos de robo y otros delitos menores que tienen cita en el tribunal el próximo octubre de su respectiva ciudad.