Un año después, papá descubrió al presunto asesino de su hijo en un video de su celular

Durante más de un año, la familia de Michael Boschetto vivió sumida en el dolor y en las preguntas sin respuesta. El joven de 32 años fue apuñalado en la madrugada del 27 de abril de 2024 frente a su casa en Villafranca Padovana, un pequeño municipio en la provincia de Padua, Italia. El principal acusado en ese momento fue Giacomo Friso, un vecino de 34 años con el que Boschetto tenía algunas rencillas.

Recientemente, el caso que indignó a los italianos ha tomado un nuevo giro y todo gracias al papá de Boschetto, quien en medio de su dolor no dejó de buscar justicia. Y la encontró en el celular de su hijo. Lo que nadie imaginó es que esta nueva prueba habría sido grabada por el propio asesino, con el teléfono que le robó a su víctima, y que se mantuvo oculta durante más de doce meses.

¿Qué encontró en el celular de su hijo?

El hallazgo del padre de Michael, según reveló el diario El Mundo, llegó casi que milagrosamente luego de un año del fallecimiento del joven. A pesar que durante varios meses la policía había intentado acceder el iPhone del joven, que recuperaron en manos de Friso, todos sus intentos habían sido fallidos y regresaron el teléfono a la familia de la víctima. Con la ayuda de un experto, el papá logró desbloquear el celular con la intención de encontrar algún mensaje, llamada o pista sobre las últimas horas de vida de su hijo.

Entre las fotos y archivos, encontró un video 'selfie' grabado el mismo día del crimen. Lo que más llama la atención de esta grabación es que en ella aparece Friso, mirando a la cámara con una expresión burlona, pocos minutos después de haber apuñalado a Boschetto. El video no tiene sonido, solo son unos segundos en los que la cara del presunto asesino queda registrada, como si fuera un trofeo de su acto, mientras Michael agonizaba en el suelo, a escasos metros de su casa. Un clip escalofriante que podría convertirse en pieza clave en el juicio que se reanudará el 11 de septiembre en el Tribunal Penal.

Fotos: Redes sociales

¿Cómo murió Michael Boschetto?

Lo que se sabe sobre el caso es que, en la madrugada del 27 de abril ocurrió una pelea aparentemente sin motivo entre los vecinos. Friso, con antecedentes por comportamiento errático y una reciente salida de un centro de rehabilitación, llegó a la casa de Boschetto alrededor de las 4:30 a. m. y golpeó la puerta con violencia, primero con una rueda de bicicleta, luego con las manos. Michael bajó a confrontarlo, se enfrentaron físicamente y Friso regresó a su casa golpeado.

Aunque todo pudo haber terminado ahí, media hora después Friso regresó con un cuchillo. A las 5:30 a. m. Michael, sin saber que su agresor volvería, escribió un mensaje a su novia confirmando que pasarían el fin de semana juntos. Esa fue su última acción consciente. A las 6:00 a. m., Friso volvió armado y atacó a Michael frente a la entrada de su casa, cuando este se disponía a encender un cigarrillo. Lo apuñaló cuatro veces: en el pecho, en el rostro, en el cuello.

Lo que ahora se puede interpretar con esta nueva prueba es que, después del ataque, Friso tomó el teléfono móvil de su víctima, se fue caminando a su casa y grabó un video 'selfie' en el que aparecía sereno, casi satisfecho, según fuentes judiciales. La prueba dormida durante un año, oculta a la vista, ahora resurge como un posible elemento crucial para la Fiscalía.

Fotos: El Mundo

¿Qué se sabe sobre el presunto asesino?

Giacomo Friso era conocido en el vecindario como una figura impredecible, marcada por adicciones y episodios de violencia. En los días previos al crimen, se le vio caminando descalzo, armado con cuchillos, sin dormir, en lo que parecía un estado de psicosis o deterioro mental. Esa madrugada, tras cometer el crimen, intentó huir, pero un vecino policía logró detenerlo cerca de la casa de Michael. Desde entonces permanece en prisión preventiva.

El caso volverá a ser debatido en los tribunales en septiembre. La aparición del video se considera una prueba con enorme carga simbólica y procesal que no solo muestra al acusado en posesión del teléfono robado, sino también su actitud inmediatamente posterior al crimen. Los abogados defensores no han negado la autenticidad del clip, pero se espera que intenten desestimar su valor probatorio, argumentando problemas de salud mental.

Este caso no solo ha impactado por su historia, sino también porque ha causado indignación contra los peritos de la Fiscalía que nunca pudieron acceder a la información del teléfono de la víctima. Finalmente, fue el padre el que, en un momento de soledad y desesperación, logró acceder a la prueba reina en contra del presunto asesino de su hijo y podría obtener justicia muy pronto.

MARÍA PAULA GONZÁLEZ
PERIODISTA DIGITAL DE NOTICIAS CARACOL