En Estados Unidos, a los menores de 2 años con esta condición les garantizan un tratamiento para mitigar las consecuencias.
La atrofia muscular espinal afecta la capacidad para caminar, gatear, tragar, controlar la cabeza y el cuello y funciones básicas como respirar.
“Los niños nacen sin la capacidad de preservar la función de las hormonas motoras, que son las células que controlan todos los movimientos musculares del cuerpo”, detalla David Lennon, investigador del medicamento que ayuda a los pacientes.
Sobre el tratamiento, el investigador Jerry Mendel explica que se trata de “una terapia transformadora que introduce un gen para reemplazar el daño de los niños, esto evita el deterioro de los músculos y les da la capacidad de sentarse”.
Sin duda es un gran avance de la ciencia, pues gracias a estas terapias algunos pacientes han logrado volver a caminar.
Updated: junio 04, 2019 09:59 a. m.