Pese a que aún no se conoce el motivo que habría desencadenado el asesinato, las autoridades manejan posible hipótesis que correspondería a un problema familiar.
La trágica pérdida de la niña Emily Suleyni Rivera de once años, cuyo cuerpo fue hallado desmembrado cerca de su casa, ha estremecido a la comunidad de Santander de Quilichao, norte del Cauca.
“Impotencia, era una niña indefensa y por supuesto una niña que no tenía nada que ver con cualquier situación de tipo social”, dice Oswaldo Hurtado, docente de la menor.
Por eso sus compañeros de estudio, profesores, amigos y familiares salieron a marchar para exigir justicia.
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En contexto:
Cuerpo desmembrado y dentro de un costal sería de niña desaparecida Una de las profesoras de la menor recuerda los momentos previos a su desaparición: “Habernos dado un abrazo en la mañana y luego al regresar, al otro día, que estaba desaparecida, y horas después así como la encontraron, es muy duro”, afirma maestra de la niña.
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La mamá de la pequeña, en medio de su dolor, dijo desconocer el origen del crimen: “No tengo ninguna deuda, mi exesposo tampoco tiene nada de deudas, nadie, nosotros no tenemos nada que ver a nadie. Yo misma trabajo y mantengo a mis dos hijas, yo soy madre soltera”, señala Mercy Nayeri Barreiro.
Entre tanto, las autoridades siguen sin pistas sobre el caso: “Le hemos pedido a la Fiscalía que efectivamente, esté un grupo especializado en ello, para lograr esclarecimiento de los hechos y sobre todo para dar un buen recaudo del autor o los posibles autores de este delito”, explica Álvaro Mendoza, alcalde de Santander de Quilichao.
La comunidad del municipio caucano reclama respuestas, no solo por el crimen de Emily, sino también frente a la ola de violencia que se vive en la localidad.
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