Laires Tijera ha visto cosas durísimas en su trabajo, la unidad móvil de criminalística de la Policía de Tránsito en Bogotá.
Ella, que desempeña labores topográficas durante la inspección de cuerpos de personas víctimas de accidentes, afirma que abordar a familiares de las víctimas es lo más difícil.
Laires ha atendido hasta 10 casos en un día y dice que su mayor deseo es llegar a ser comisaria. Para eso le hace faltan 20 años.