Se trata de una consulta popular que busca acabar con la intermediación de las EPS, para que recursos de salud lleguen directamente a clínicas y hospitales.
Se requieren de dos millones de firmas para que la iniciativa, liderada por una comisión de ciudadanos de Cali, prospere y que la Registraduría abra las urnas para que los colombianos sean quienes decidan. Hasta el momento se han recogido 300.000 firmas.