Noticias Caracol conoció el pliego de cargos del Ministerio Público en contra del oficial, que revela detalle a detalle el entramado de corrupción que presuntamente dirigió el alto oficial desde el comando de la Cuarta Brigada del Ejército entre los años 2015 y 2017.
El general en retiro Jorge Horacio Romero Pinzón fue su comandante en ese periodo, luego pasó a dirigir el comando de Acción Integral del Ejército, pero en julio del año pasado fue llamado a calificar servicios por cuenta de una serie de irregularidades en el manejo de unos recursos.
En el documento al que tuvo acceso Noticias Caracol, la Procuraduría recopila testimonios clave respecto a los presuntos sobrecostos para la compra de combustible y la aparente omisión del general Romero de denunciar lo que estaba sucediendo cuando era comandante de la Cuarta Brigada del Ejército.
Es un informe de 33 páginas, con fecha del 5 de junio de 2020, que reúne las pruebas que enmarcan la investigación disciplinaria que adelanta la Procuraduría contra el general.
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También contiene el resultado de las visitas del Ministerio Público a esa unidad militar en julio del año pasado, las consultas al expediente en la Fiscalía delegada ante la Corte Suprema de Justicia y la recepción de la declaración juramentada del mayor Andrés Vargas, quien fungía como oficial de contrainteligencia, y que revela detalles hasta ahora desconocidos del entramado de corrupción en esa brigada militar que presuntamente dirigía el general Romero.
En su declaración juramentada, el oficial Vargas señala que las sospechas empezaron cuando en los registros, los kilometrajes de los vehículos de la brigada no coincidían con la cantidad de combustible utilizado. Los reportes eran escandalosos.
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"Se evidenció que siempre dieron el mismo kilometraje y en un solo día un vehículo a las 12:35 horas tanqueó 135 galones, ese mismo vehículo a las 12:53 horas tanqueó otros 135 galones, ese mismo vehículo a las 13:11 horas tanqueó 134 galones y así sucesivamente hasta las 14:55 que reclamó otros 135 galones, para 1.079 galones que reclamaron en un solo día para un solo vehículo, sin haber reportado el kilometraje necesario para tanquear mil galones, mil galones no los puede consumir un solo vehículo, o sea, tanqueó siete millones ochocientos noventa y cuatro mil cuatrocientos setenta", dice el informe.
Combustible para un bus parqueado
Las presuntas irregularidades sumaban cerca de 78 millones de pesos en las que había, incluso, un bus de placas LHA 663 que estaba en mantenimiento, es decir parqueado.
Tenía registros de tanqueo por un valor cercano a los 21 millones de pesos.
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Ya con todas las evidencias, aseguró el mayor Vargas a la Procuraduría, se presentó ante el general Romero a finales de agosto del 2016. "Se le expuso a mi general que el bus que estaba en mantenimiento estaba consumiendo combustible, que algunos vehículos tanqueaban más de lo que realmente deberían tanquear (...) y pues se le mostraban algunos videos", está en el pliego de cargos.
Y lo que esperaba que fuera una felicitación por encontrar un desfalco terminó con un fuerte llamado de atención.
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Para la Procuraduría estos hallazgos dan cuenta de faltas disciplinarias gravísimas donde hubo dolo por parte del general Jorge Romero, ya que permitió el uso indebido del combustible y además omitió la denuncia pese a que fue informado de las irregularidades dentro de la unidad militar.
En la segunda parte del documento también se evidencian los hallazgos del Ministerio Público frente a una presunta extralimitación del general Romero, en la que habría expedido de forma directa permisos de tenencia y porte de armas cuando fue comandante de la Cuarta Brigada.
El ente de control recibió para tal fin un disco compacto con una entrevista de un empresario de Medellín donde revela detalles de estas irregularidades.