Foto: Archivo Colprensa
Testigos aseguraron que la menor al parecer fue "poseída" por alguna fuerza paranormal. La joven tuvo que ser tranquilizada por unos pastores que acudieron a la institución educativa, ubicada en el oriente de la capital del Valle.
"Las niñas estaban jugando con eso que sale en internet y parece que a un espíritu poseyó a una de ellas y estaba desesperada. Hubo la necesidad de despachar a los alumnos, porque los demás niños también entraron en pánico al verla gritar", señaló Adam Barbosa, docente del colegio.
El juego, conocido como Charlie, Charlie, se volvió popular en las redes sociales. Jóvenes del Valle del Cauca se vieron atraídos por esta práctica que consiste en dividir una hoja en forma de cruz, colocar dos lápices sobre las líneas y escribir en dos fragmentos "si" y en los otros dos "no". Los participantes invocan a un espíritu de nombre Charlie, hacen una pregunta y esperan su respuesta en el movimiento de los lápices.
Ante esta situación, el grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía del departamento desarrolló a finales de mayo la campaña 'Yo no juego con Charlie', que consistió en entregar volantes en colegios para concientizar a los estudiantes sobre esta tendencia.
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"Hemos tenido experiencias negativas donde han resultado jóvenes afectados sicológicamente, con pánico colectivo y que tienden a creer cosas que no corresponden a la realidad", dijo en ese momento el coronel Javier Martín, el subcomandante de la Policía del Valle del Cauca.