Zambrano es,
según la Procuraduría, responsable de la comisión de los delitos penales de
"cohecho propio e interés indebido en la celebración de contratos".
Un comunicado de
la Procuraduría señala que Zambrano acordó con Emilio Tapia, Federico Gaviria e
Hipólito Moreno, vinculados a los hechos de corrupción de Bogotá "una
promesa remuneratoria del 10 % del valor del contrato que buscaba que se le
adjudicara la licitación para la prestación del servicio de ambulancias en la
capital del país a la Unión Temporal Transporte Ambulatorio Bogotá".
Agregó que
Zambrano se interesó en la adjudicación del proceso licitatorio
"direccionándolo para que finalmente fuera adjudicado a la Unión Temporal
Transporte Ambulatorio Bogotá" que dio lugar a la firma del contrato entre
el Fondo Financiero Distrital de Salud y tal empresa privada, cuyo monto fue
superior a los 67.203 millones de pesos.
Zambrano, apuntó
la Procuraduría, "era conocedor de la ilicitud de su comportamiento y con
esto causó un gravísimo daño social, teniendo en cuenta que el comportamiento
se relaciona con un derecho fundamental, el de la salud".
Francisco Forero, abogado defensor, aseguró que llevará la decisión, que calificó como exagerada, ante el Consejo de Estado para que sea el alto tribunal el que defina el caso en última instancia.