El municipio de Argelia, en el Cauca, enfrenta una grave situación de orden público tras estar confinados por miembros de las disidencias de las FARC, quienes han restringido la movilización y el ingreso de víveres. Más de 6.000 campesinos están siendo afectados.
Las autoridades locales y departamentales han manifestado su rechazo frente a estos actos en contra de la comunidad, donde usan a la población civil como escudo humano para retirar a las Fuerzas Militares de la zona.
Guido Rivera, líder campesino de la zona, dice que, desde el corregimiento El Plateado hacia abajo, la gente está confinada por los grupos armados al margen de la ley, quienes obligan a las comunidades a "sacar al Ejército, como lo han hecho en anteriores ocasiones".
Rivera asegura que en ocasiones anteriores los pobladores se han negado a ejercer esta práctica impuesta por las disidencias, por lo cual ellos, en retaliación, han restringido la entrada de alimentos y combustibles. Además, se habla de que cortaron los servicios de energía y comunicaciones.
El Ejército Nacional rechazó y condenó que los grupos armados ilegales utilicen a la población civil como escudo humano.
"No podemos permitir que estas estructuras de la Carlos Patiño se encuentren instrumentalizando a la población y quieran venir a sacar al Ejército de nuestras áreas", expresó el general Federico Mejía, comandante del Comando Específico del Cauca, asegurando que las tropas del Ejército no se retirarán de la zona.
La delicada situación ha hecho que empiece a presentarse escasez de diferentes elementos. Jonathan Patiño, alcalde de Argelia, manifestó que "no hay fluido eléctrico y está prohibido ir a arreglarlo".
Desde esta región del Cauca piden al Gobierno nacional garantías para el ingreso de los alimentos y velar por la seguridad de los campesinos afectados en Argelia y sus corregimientos aledaños.
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