Las fotografías y sus prendas de vestir son los recuerdos a los que se apega la familia de Alejandro Ramírez, el ingeniero que hace un año desapareció y de quién hasta ahora no se ha tenido ni el más mínimo rastro.
Lo último que se supo de Ramírez es que salió a cumplir una cita con un cliente en Girardota, después de dicha reunión nunca regresó.
La camioneta en que se transportaba el ingeniero apareció, en mayo del año pasado, en un operativo en Sabaneta con las placas falsificadas.
Tras un año de búsqueda no se tiene ni un rastro del ingeniero y aún permanece activa la recompensa de 50 millones de pesos a quien revele su paradero.
Updated: marzo 03, 2016 11:53 a. m.