El pequeño de 1 año nació de 27 semanas, pesó 1 libra y sobrevivió pese a todos los pronósticos. Ahora se enfrenta a una larga recuperación que le dará una nueva oportunidad.
Los participantes deberán poner todos sus dispositivos en una caja y al final pasar por una prueba de polígrafo para confirmar que no sucumbieron a la tentación de estar conectados.