Ocho años han pasado desde que una explosión estremeció el corazón de Bogotá. El 17 de junio de 2017, en vísperas del Día del Padre, el Centro Comercial Andino fue escenario de un atentado terrorista que dejó una marca profunda en la memoria de la ciudad. Cerca de las 5:00 p.m., una bomba estalló en el baño de mujeres del segundo piso, cobrando la vida de tres personas e hiriendo a otras nueve. A pesar del tiempo transcurrido, las víctimas y sus familias siguen esperando justicia.El Centro Comercial Andino, uno de los más concurridos y exclusivos de Bogotá, estaba lleno de familias y compradores cuando ocurrió la tragedia. La explosión, provocada por un artefacto explosivo colocado en el baño de mujeres, generó pánico y caos.Las víctimas mortales en el Centro Comercial Andino fueron:Julie Huynh, ciudadana francesa de 23 años.Ana María Gutiérrez, de 27 años.Lady Paola Jaimes, de 31 años.La detonación no solo cobró tres vidas, sino que también dejó heridas físicas y emocionales en otros afectados. Entre los heridos se encontraba Nathalie Nadine Veronique Levrand, madre de Julie Huynh, quien la acompañaba ese día.Julie Huynh: una vida dedicada a ayudarJulie Huynh había llegado a Colombia para realizar un voluntariado que hacía parte de la maestría que cursaba en acción humanitaria. La práctica duró seis meses en la Fundación Proyectar Sin Fronteras, en el barrio Santa Rosa de Bogotá. Allí enseñaba, jugaba con los niños y los acompañaba en actividades recreativas.“Julie era una compañera, trabajamos seis meses con ella y perderla fue un golpe muy duro. Ese golpe hizo el trabajo de Julie más importante aún”, recordó en Los Informantes - en septiembre de 2017 - Raphael Molcard, voluntario francés y colega de Julie.Julie había terminado su práctica dos semanas antes del atentado. Su madre había viajado desde Francia para recorrer el país juntas antes de regresar a París y cursar allí el último año de su maestría. Pero el destino les tenía otro plan.El momento de la tragedia en el AndinoJulie y su madre estaban en el baño del centro comercial cuando ocurrió la explosión. La joven había entrado a uno de los cubículos y su madre sostenía la puerta, que no cerraba bien. En ese instante, la bomba estalló. La onda expansiva fue tan fuerte que Julie falleció en el acto. Su madre resultó herida.“Julie era como todos los voluntarios que llegan aquí, apasionada, quería mucho su trabajo, quería dar, con una sonrisa increíble”, dijo Molcard.Julie era la menor de tres hermanos, una viajera apasionada con raíces vietnamitas. Había recorrido tres continentes y soñaba con cambiar el mundo a través de la acción humanitaria.“Los niños veían en Julie como una gran hermana. Ella era la personificación de nuestra generación, con ganas de ayudar, con ganas de cambiar el mundo”, añadió Raphael, quien también es francés.Julie y Raphael llegaron a Colombia con ganas de ayudar, con ganas de cambiar el mundo, los dos venían de Francia, pero se conocieron en Bogotá, aplicaron a una oferta de Proyectar Sin Fronteras, una fundación creada por dos colombianos en Francia y que en Colombia tiene programas sociales que benefician a más de 900 personas.En honor a su memoria, la Embajada de Francia en Colombia anunció la creación de un premio beca que lleva su nombre: Premio Julie Huynh, un reconocimiento para jóvenes tanto colombianos como franceses que en su día a día aporten tiempo y conocimientos como voluntarios para construir una sociedad en paz. La historia de esta joven francesa sigue inspirando a quienes creen en un mundo más justo y solidario. En la Fundación Proyectar Sin Fronteras, los niños y voluntarios la recordaron con cariño, pues su paso por Colombia dejó una huella imborrable.¿Justicia pendiente?Hasta el año 2024, las víctimas del atentado seguían exigiendo justicia. Denunciaban que el proceso judicial no avanzaba y que no habían recibido reparación por los daños sufridos. En una carta enviada al Gobierno nacional, pidieron respuestas y acciones que evitaran que el caso quedara en la impunidad.Ocho años después, el dolor persiste. Las familias de Julie, Ana María y Lady Paola, así como los heridos y sobrevivientes, piden verdad, justicia y reparación. La memoria de las víctimas exige que este caso no sea olvidado.
En Barranquilla, un equipo médico logró una intervención quirúrgica que marcó un hito a nivel mundial. En enero de 2024, una mujer embarazada por tercera vez enfrentó una difícil noticia: el feto presentaba gastrosquisis, una condición congénita en la que los intestinos crecen fuera del cuerpo, lo que ponía en riesgo su vida. Los Informantes acompañó a los especialistas durante esta operación pionera, realizada mientras el bebé aún estaba en el útero, y que hoy es considerada una hazaña de la ciencia hecha en Colombia.“Con lágrimas y aplausos dentro del quirófano estamos haciendo un hito a nivel mundial. En ese punto tú dices de verdad, vale la pena ser médico, ser investigador y asumir estos riesgos porque puedes transformar la vida de un ser humano”, relató el ginecólogo y obstetra Miguel Parra, quien lideró esta intervención sin precedentes.Tras una ecografía, María de los Ángeles Lugo recibió una noticia confusa, angustiante y devastadora: la vida de su bebé corría peligro dentro de su vientre. “Yo no tenía ni idea de qué era la gastrosquisis. El ombligo de mi bebé no se había cerrado bien y se le salían las asas intestinales”, contó la madre.Según el especialista, quien lleva años investigando cómo curar la gastrosquisis dentro del útero para que los bebés nazcan completamente sanos, este fue el primer procedimiento exitoso de reparación fetoscópica de gastrosquisis, una técnica revolucionaria realizada en Colombia por primera vez.Aunque afirmó que lo complicado de esta condición es que no se puede solucionar cuando el bebé nace porque es “muy tarde” y las “lesiones que han ocurrido van a llevar a la muerte o deterioro que no le permite tener una vida digna”.¿Qué es la gastrosquisis?Se trata de un defecto congénito en el que los intestinos, y en algunos casos otros órganos, se desarrollan fuera del cuerpo del bebé a través de una abertura en la pared abdominal, cerca del ombligo. Por la complejidad de esta condición y los riesgos que implica, a muchas madres gestantes que reciben un diagnóstico de gastrosquisis se les sugiere considerar la interrupción del embarazo.Miguel Parra detalló que esta condición ocurre entre 4 o 6 de cada 10 mil nacimientos en el mundo y “va en aumento”, además, agregó que “el 6% fallecen antes de nacer, el 20% en la etapa prenatal y hay un porcentaje variable de un 20% que nacen con un síndrome de intestino corto quedan o con secuelas gigantes”.En el caso de la bebé Maía, conocida como la ‘bebé milagro’, logró nacer completamente sana y sin secuelas que afectaran su desarrollo.Así se realizó la primera cirugía a un feto en el úteroMaría de los Ángeles, de 25 años, nació en Venezuela, pero su madre es colombiana. Contó que, tras experimentar un fuerte dolor abdominal, los médicos le informaron que su bebé tenía gastrosquisis. Gracias al diagnóstico oportuno, se sometió a la primera cirugía de este tipo realizada en Colombia, con el objetivo de salvarle la vida a su pequeña Maía.“Yo pensé lo peor, pensé: ‘se me complica, me sacan la bebé, se me muere’”, dijo en un principio María de los Ángeles. Aunque la reparación fetoscópica de gastrosquisis ya se había intentado en Estados Unidos y Europa, el verdadero ‘milagro’ ocurrió por primera vez en Barranquilla, marcando un hito médico como una innovación exitosa sin precedentes en Colombia.La mujer tenía 25 semanas de embarazo cuando se realizó el procedimiento, el cual duró varias horas. La cirugía consistió en extraer el útero y colocarlo sobre el abdomen materno, para luego drenar el líquido amniótico y reemplazarlo con un gas; luego entrar a la placenta con una cámara e instrumentos diminutos para empujar los intestinos hacia adentro.Finalmente, los especialistas suturaron cuidadosamente el orificio para evitar que los órganos volvieran a salir, reintrodujeron el líquido amniótico y colocaron nuevamente el útero en su lugar. Un procedimiento que ha requerido años de investigación y que hoy representa una verdadera hazaña en la ciencia.A pesar de los riesgos, Maía nació sana y salva unos meses después de la cirugía. “Habíamos tenido los riesgos controlados, teníamos la experiencia y logramos primero que todo devolver los intestinos adentro y que la bebé naciera en perfectas condiciones”, afirmó Parra.Cabe resaltar que este médico, oriundo de Boyacá, ha realizado más de 40 cirugías intrauterinas, incluyendo decenas de intervenciones para corregir malformaciones en la columna de fetos y un caso inusual en el que un bebé venía con otro bebé dentro de su cuerpo, y ambos nacieron sin complicaciones. Ahora, a su trayectoria se suma un nuevo hito: la primera reparación fetoscópica de gastrosquisis exitosa en el mundo.Según el especialista, esta intervención quirúrgica podría salvar la vida de cerca de 200 niños cada año en Colombia. Aunque a primera vista puede parecer costosa, en realidad reduce significativamente los gastos en cuidados médicos y cirugías posteriores, al prevenir complicaciones graves desde antes del nacimiento.“La ciencia médica en Colombia en Latinoamérica deben empoderarse y entender que sí se puede hacer medicina de alto nivel aquí”, concluyó el especialista Miguel Parra, quien hoy le da esperanza a decenas de miles de madres en todo el mundo.
Flor Rojas Cuesta ha vivido los últimos 19 años con un hueco en el alma. Su hijo Beyer Harbey Díaz Rojas desapareció en medio del conflicto armado en Colombia y la vida de su familia se transformó en una espera angustiante. Beyer tenía apenas 20 años cuando fue asesinado, según le dijeron, en la vereda El Placer, municipio de Cumaribo, Vichada. Pero nunca le entregaron su cuerpo. Nunca hubo un entierro. Nunca hubo un cierre.“Mi mayor anhelo es darle cristiana sepultura y saber dónde está, porque no sé dónde está él. Quiero encontrar sus restos. Necesito salir de esta incertidumbre, tener paz en mi corazón, descansar de este dolor tan tremendo”, repite Flor. Junto a ella ha estado siempre su hija, Eliana Vanessa Díaz, hermana de Beyer que también ha vivido entre el duelo y la esperanza. Lo recuerdan como un joven sencillo, trabajador, que apenas comenzaba su vida adulta. “Él trabajaba en una finca como peón, ordeñaba vacas, sacaba el ganado. [Dicen] que lo mataron por disputas de tierras de grupos ilegales en esa zona”, recuerda Eliana.La familia vive en Bucaramanga y durante los años siguientes a la desaparición y muerte de Beyer, en el ir y venir entre Bogotá y Bucaramanga, poco y nada lograron saber sobre dónde estaban los restos del joven y cómo podrían recuperarlos para poder despedirlo como deseaban.El hombre que les ofreció esperanzaEn abril de 2023, cuando ya parecían agotadas todas las vías, apareció en sus vidas Omel Alejandro Velásquez Vega, un hombre que se presentó como abogado con contactos en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Unidad para las Víctimas. Decía tener experiencia en trámites similares y mostró documentos que parecían oficiales. Les habló de una base de datos de cuerpos sin identificar en la zona donde desapareció Beyer. Según él, podría identificar cuál era el correcto y tramitar la entrega. “Nos mostró unos documentos donde decía que había más de 300 cuerpos en la región, que iba a clasificar por edad, fecha y rasgos. Que haría estudios para encontrar a mi hermano”, cuenta Eliana. Por su gestión, Omel Alejandro no pidió grandes sumas de entrada. Comenzó solicitando dinero para viáticos, fotocopias y trámites menores. Luego, en junio de 2023, compartió más documentos falsos: confirmaciones de la JEP y de la Unidad para las Víctimas de su trabajo en la búsqueda del cuerpo y unas solicitudes de exámenes de ADN. Para esto último pidió $800.000 por cada muestra genética para comparar con unos restos que, según él, tenían coincidencia con Beyer. Pronto llegaron los resultados: coincidencia del 99,9 % con los padres. Flor y Eliana rompieron en llanto, finalmente iban a sepultar a Beyer. Entonces la familia reunió más dinero. En total, entre 50 y 60 millones de pesos, producto de años de trabajo, ahorros y sacrificios, fueron entregados a Omel Alejandro. Empezaron incluso a planear la misa, a diseñar la lápida para el cementerio y a coordinar la sepultura. Pero esto nunca pasó.Jugó con el dolor de una familiaLa ilusión de la familia Díaz Rojas comenzó a resquebrajarse en agosto de 2023. Alejandro les envió un archivo PDF con la imagen de un cheque que supuestamente les giraría el Estado como compensación. Eliana, con algunas dudas, fue a verificar al banco. Allí le dijeron que el logo que aparecía en el documento “no lo usamos hace dos años”. Era falso.Al confrontarlo, Omel Alejandro mantuvo su versión. Dijo que ya tenía los restos, que solo faltaban unos formularios y que debían cremar el cuerpo. Pero algo no encajaba. Entonces Eliana decidió acudir directamente a la JEP. Allí le confirmaron lo que temía: todo era una mentira. No había registros, no había trámites, no había cuerpo. “Es un cobarde. Juega con el dolor ajeno, no tiene corazón”, dice Flor.¿Quién es Omel Alejandro Vásquez y qué responde al respecto?Sétimo Día pudo confirmar que Omel Alejandro Velásquez Vega no es abogado, no tiene tarjeta profesional en Colombia. Al consultar con las entidades con las que supuestamente estaba gestionando el trámite de la familia, confirmaron que tampoco es funcionario ni está vinculado con la JEP ni con la Unidad para las Víctimas.Harvey Danilo Suárez, secretario ejecutivo de la JEP, explicó que “lamentablemente, personas inescrupulosas se aprovechan del sufrimiento y se presentan como abogados o intermediarios ofreciendo contactos y respuestas falsas”. Gloria Cuartas Montoya, directora encargada de la Unidad para las Víctimas, fue aún más directa: “Si hay tramitadores afuera que estafan, esos carteles tienen puntos de enlace. Hoy tenemos 9.348 casos de quejas, más de 3.000 sustentadas ante la Fiscalía. Es urgente profundizar las investigaciones”.Este programa intentó contactarlo por múltiples medios para que respondiera a la denuncia en su contra, pero no fue posible obtener respuesta. Según información recopilada, el hombre sería oriundo de Garagoa, Boyacá, donde cursó primaria y bachillerato. Sin embargo, familiares informaron que ya no vive allí y que se habría radicado fuera del país.La familia de Beyer denunció a Omel Alejandro Velásquez Vega el 1 de septiembre de 2023 ante la Fiscalía, por estafa y falsedad en documento público. Mientras tanto, la tumba que la familia mandó a hacer sigue vacía, la misa no se celebró y su herida sigue abierta. La mamá de Beyer tiene claro su deseo: "Quiero que lo lleven a la cárcel porque es lo que se merece”. Ella y su hija no solo buscan justicia, también esperan que su historia sirva como advertencia a otras familias víctimas del conflicto, para que no caigan en las mismas redes de mentiras y manipulación emocional.
En Colombia, un porcentaje significativo de niños y niñas crecen en hogares donde uno de los progenitores, generalmente el padre, está ausente. Según un estudio de mediados de 2024 realizado por la Universidad de La Sabana, un 80% de los niños nacidos en nuestro país son criados solo por sus madres, creciendo con la ausencia de una figura paterna presente. Es por eso que cada papá presente y amoroso con sus hijos es un rasgo a resaltar y, en Antioquia, existe uno que es padre y madre de cuatro niñas.Carlos David Salazar conoció a Carolina Morales a través de una plataforma de citas para católicos. Desde el principio, su conexión fue profunda, marcada por valores compartidos y un anhelo común: construir una familia grande y amorosa, como las que ambos admiraban de sus abuelos. Durante siete años mantuvieron un noviazgo sólido, lleno de sueños y planes, hasta que el 6 de septiembre de 2014 se juraron amor eterno frente al altar.Pocos meses después del matrimonio, Carolina quedó embarazada. La noticia los llenó de ilusión, pero pronto se convirtió en tristeza cuando perdieron al bebé que esperaban. A pesar del dolor, la pareja mantuvo la fe. Tres meses más tarde se enteraron que Carolina estaba embarazada de gemelos. Esta vez, todo marchó bien. Aunque en un principio pensaron que serían niños y planeaban llamarlos Eduardo y Gregorio, la sorpresa fue doble: llegaron dos niñas, María Camila y María Elisa."Estuve todo el tiempo al lado de ella, me tocó ver el nacimiento de cada una, tomar fotos, haciendo chistes con el médico. Carito hablaba con nosotros. Nacieron con solo dos minutos de diferencia", recuerda Carlos David. Fue un parto normal y ambas niñas nacieron sanas, llenando de alegría el hogar en Rionegro, Antioquia.Sorpresa por partida dobleSin planearlo, nueve meses después, Carolina despertó a su esposo con una sorpresa. En una cajita le guardó una prueba de embarazo positiva que decía "Saludos, papá". Emocionados, imaginaron que esta vez podrían tener el niño que tanto anhelaban. Pero el destino tenía otros planes. En la ecografía, el médico abrió los ojos con asombro y los miró con cara de susto. "¿Doctor, todo está bien?", preguntó Carlos. La respuesta fue inesperada: "Van a ser papás de gemelos otra vez".La noticia fue impactante. "Uno también siente miedo, es un reto demasiado grande y en muy poco tiempo", dijo Carlos. Pero Carolina, con su serenidad habitual, respondió: "Dios nos quiere mucho, nos está confiando otras dos almas". La probabilidad de vivir dos embarazos de gemelos idénticos es de 1 entre 700 mil nacimientos.Esta segunda gestación no fue tan llevadera como la anterior. Carolina padecía una enfermedad autoinmune que complicó su salud durante el embarazo. Y otra vez, la posibilidad de tener varones se desvaneció cuando les confirmaron que esperaban otras dos niñas. A pesar de las dificultades, la pareja llegó al hospital el 20 de septiembre de 2017 ilusionada y tranquila, lista para recibir a las nuevas integrantes de la familia por cesárea.Carlos recuerda ese día en el quirófano con claridad. Propuso llamar a las niñas María Alejandra y Laura María, pero el médico sugirió evitar repetir el "María". Carolina, entre risas, lo apoyó. Finalmente nacieron Alejandra y Laura, sanas pero pequeñas, y pasaron sus primeros días en la UCI. Todo parecía marchar bien, hasta que ocurrió lo impensable.El adiós más inesperadoMinutos después del nacimiento, mientras Carlos iba a tomar fotos de sus hijas recién nacidas, recibió una noticia devastadora. Carolina había sufrido un paro cardíaco. "Me dicen que en ese momento dijo: 'me siento un poco indispuesta'. Tosió dos veces y se le apagaron todos los signos vitales". Los médicos intentaron reanimarla 13 veces, la operaron dos veces y entraron al quirófano con múltiples equipos.Carlos no quiso abandonar la sala. "Yo les dije: 'yo no me voy a salir, mi esposa me necesita en este momento, yo me quedo en esta silla y no les pongo pereque'". Vio durante dos horas cómo luchaban por salvarla. Le dijeron que las probabilidades eran del 10%, pero él no perdía la fe. "Tenía 39 años, no le dolía una muela, alcanzó a ver a sus dos hijas y ya". Carolina murió por un tromboembolismo cardiopulmonar causado por líquido amniótico, una complicación que ocurre en 6 o 7 de cada 100 mil nacimientos.Solo con cuatro pequeñasEn un abrir y cerrar de ojos, Carlos se convirtió en padre y madre de cuatro niñas menores de dos años. Estaba perdido, de luto y sin idea de cómo seguir. Pero no estaba solo. Familiares, amigos y hasta vecinos se volcaron en apoyo. Le llevaban pañales, comida, juguetes. Las Marías y las recién nacidas encontraron consuelo en la red de amor que se tejió a su alrededor."He sido de carácter fuerte toda la vida, pero la mejor escuela de paciencia que Dios me ha mandado son estas niñas", asegura Carlos. Aprendió a bañarlas, alimentarlas, calmarlas y aunque al principio reconoce que fue torpe, hoy domina cada rutina.Llegó una quinta hijaEl tiempo pasó y Carlos encontró una nueva compañera. Aunque esa relación no funcionó, de esa unión nació Isabella, la quinta niña que llegó a ampliar aún más su universo femenino. "Me he vuelto muy práctico con estas mujeres, he aprendido a entenderlas. Para uno como hombre que tiene un chip distinto, me ha tocado aprender esa naturaleza femenina, entender los gustos de cada una, los estilos".Hoy, las Marías tienen 9 años y Alejandra y Laura 7. Isabella es la más pequeña. Las cinco comparten una vida llena de risas, peleas, juegos y cariño. Aunque cada una tiene su personalidad, todas coinciden en algo: la fuerza de su papá. Carlos es el pilar de este hogar donde la ausencia de Carolina se convierte en memoria viva, y donde el amor no se ha fragmentado, sino multiplicado.La familia Salazar funciona con sus propias dinámicas. Carlos ha tenido que aprender todo sobre trenzas, uniformes, tareas escolares y crisis emocionales. Ha enfrentado preguntas difíciles con honestidad y ha sostenido a sus hijas con una ternura que rompe estereotipos. "Ellas son mi fuerza y mi motivo todos los días", dice con orgullo.A pesar del dolor, esta es una historia de esperanza, resiliencia y reinvención. La vida, con todas sus pruebas, le dio a Carlos David Salazar cinco razones para seguir adelante. Y él las abraza cada día, con amor, valentía y la certeza de que no está criando solo hijas: está formando mujeres fuertes, como lo fue su madre Carolina, como son ellas mismas.
Son muchas las personas que suelen comportarse con amabilidad por simple norma de convivencia, pero ciertos gestos, actitudes y silencios pueden revelar lo contrario. Detrás de lo que algunos podrían considerar un "buen trato" también pueden esconderse gestos sutiles que indican incomodidad, indiferencia o rechazo. El psicólogo Lachlan Brown explicó en su blog que estas son conductas comunes en personas que ocultan la realidad de sus sentimientos, según la psicología. "Todos hemos pasado por eso: estás hablando con un colega o el amigo de un amigo que parece perfectamente educado, pero algo en tu interior te dice: "No le gusto mucho". La cortesía puede ser un disfraz brillante porque las normas sociales recompensan la amabilidad (...) La psicología nos brinda un mapa útil para detectar estas filtraciones, de modo que podamos dejar de dudar de nosotros mismos y tal vez establecer límites más saludables", explicó el experto. Señales de que le cae a alguien mal en secreto, según la psicologíaSon ocho los comportamientos identificados por Lachlan Brown, que han sido objeto de estudio en la psicología del lenguaje corporal y la interacción social, y que pueden ser señales claras de que alguien no siente aprecio hacia usted, a pesar de mostrarse educado o amable.La sonrisa que no involucra los ojos: de acuerdo con el experto, las sonrisas reales se reflejan tanto en la boca como en la parte superior del rostro, especialmente en los ojos. Si al sonreír, la expresión de esa persona se limita a la boca y no genera las conocidas "patas de gallo" alrededor de los ojos, puede tratarse de una sonrisa forzada. Por lo que esa sonrisa se puede relacionar más con una reacción social aprendida, no a un sentimiento auténtico de agrado.Orientación corporal distante: cuando alguien está cómodo y disfruta de una interacción, su postura se orienta hacia la otra persona: torso, hombros y pies apuntan en esa dirección. Si, por el contrario, estos se dirigen hacia una puerta, una ventana o cualquier otro punto ajeno a la conversación, puede interpretarse como una falta de interés o de deseo de involucrarse.Miradas breves o evasivas: según explicaciones del experto, cuando el contacto visual es breve y poco sostenido, puede ser también un indicio de desinterés, pues las personas tienden a establecer una mirada más prolongada con quienes les resultan agradables o familiares. Por el contrario, una persona que evita el contacto visual, o que lo interrumpe con frecuencia para mirar a su alrededor, suele estar enviando una señal no verbal de desapego.Tono de voz sin matices emocionales: una conversación agradable suele estar acompañada de un tono vocal que transmite emoción. En cambio, una voz monótona, sin inflexiones o que suena cortante, puede reflejar una desconexión emocional. A menudo, quienes no se sienten cómodos con alguien mantienen un tono neutral, responden de forma escueta o introducen silencios prolongados antes de contestar.Ausencia de interés en sus palabras: una de las formas más claras de identificar el desinterés es notar que la otra persona no formula preguntas para profundizar en lo que uno dice. Si las respuestas son cerradas, sin detalles adicionales, y no existe un esfuerzo por prolongar el diálogo, puede interpretarse como una señal de que la conversación no es deseada ni bienvenida.Comentarios ambiguos o con "doble sentido": el experto explica que estas frases suelen sonar amables en apariencia, pero, al analizarlas, contienen una carga negativa o una insinuación poco agradable y son conocidas como microagresiones. Estos comentarios, que pueden disfrazarse de elogios, suelen tener la intención de poner en duda o disminuir el valor de lo que el otro ha hecho o dicho. La ambigüedad permite que el autor se excuse fácilmente para no abordar el problema. Exclusión silenciosa en interacciones informales: la falta de invitaciones a espacios informales, como pausas para tomar café, charlas espontáneas o reuniones fuera del horario laboral, puede ser otra manifestación de desapego. Aunque no se exprese abiertamente, la omisión sistemática sugiere que no existe un interés por integrar al otro en espacios de cercanía o confianza.Actitudes pasivo-agresivas: aceptar una solicitud, pero cumplirla a medias, acceder con palabras, pero no con acciones, o acompañar afirmaciones con gestos de molestia, son ejemplos de una conducta pasivo-agresiva. En lugar de expresar directamente el malestar, la persona recurre a formas indirectas que dificultan el enfrentamiento abierto, pero que igual generan malestar en quien las recibe.¿Cómo actuar si detecta estos comportamientos?Notar estos signos no significa necesariamente que la otra persona sea hostil, pero sí puede ser útil para entender lo que realmente ese individuo le quiere demostrar. Si el vínculo es importante, puede intentar tener una conversación clara con esa persona, con respeto y sin acusaciones, pues el experto explica que expresar una percepción puede abrir la puerta a aclaraciones o mejoras en este comportamiento. Sin embargo, también es válido tomar distancia en caso de que percibe un trato distante o incómodo que no se modifica con el tiempo. No todas las personas son compatibles, y aprender a reconocer las señales del lenguaje no verbal puede ayudar a tomar decisiones más saludables en el manejo de los vínculos personales. El experto explica que las ciencias del comportamiento no ofrecen fórmulas absolutas para evitar estos comportamientos, pero sí herramientas para observar y comprender mejor con quién se relaciona. VALENTINA GÓMEZ GÓMEZNOTICIAS CARACOLvgomezgo@caracoltv.com.co
En las últimas horas se conoció el terrible hallazgo del cuerpo sin vida de un bebé en la localidad de Kennedy. El menor, de aproximadamente ocho meses de edad, fue encontrada al interior de bolsas. Las autoridades se encuentran investigando cámaras de seguridad de la zona para identificar a la persona que dejó este cadáver botado de esta manera.El hallazgo de este cuerpo sin vida fue en horas de la mañana del lunes 16 de junio, específicamente en la calle 40B sur con carrera 89A, barrio Patio Bonito, localidad de Kennedy.De acuerdo con el medio local HSB Noticias, unos recicladores que se encontraban por la zona fueron quienes habrían hallado el cuerpo del bebé de 8 meses. Los recicladores, de inmediato, dieron aviso a las autoridades.¿Quién era el bebé encontrado muerto en Patio Bonito?El medio citado indicó que, aunque no ha sido revelada por las autoridades la identidad del menor de edad hallado muerto, fuentes extraoficiales le informaron que se llamaba Juan Pérez y que el niño, al parecer, fue quemado y luego abandonado en bolsas de basura.Algunos de los vecinos de la zona que presenciaron el levantamiento del cuerpo sin vida creen que este caso se pudo haber tratado de un supuesto “rito satánico” o una posible venganza. Sin embargo, las autoridades no han especificado las causas y tampoco han relacionado este caso con ninguna persona externa.El levantamiento del cuerpo sin vida del bebé lo llevó a cabo el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación. El cadáver fue llevado al Instituto Colombiano de Medicina Legal para que se determine las verdaderas causas de la muerte del menor.¿Cómo denunciar maltrato infantil?En Colombia, los ciudadanos tienen diversas formas para denunciar el maltrato infantil, garantizando la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes. La principal herramienta es la Línea 141 del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), una línea gratuita y nacional disponible las 24 horas. A través de esta línea, cualquier persona -adulto o menor- puede reportar casos de maltrato, abuso sexual, acoso escolar, trabajo infantil o consumo de sustancias psicoactivas. Las llamadas son atendidas por un equipo especializado de psicólogos, abogados y trabajadores sociales, quienes activan las rutas de protección y coordinan con las autoridades competentes Otra opción es la Línea 123 de la Policía Nacional, útil en situaciones de emergencia o peligro inminente. También se puede utilizar la aplicación móvil “A Denunciar”, que permite reportar casos de forma virtual desde cualquier lugar del país Además, los ciudadanos pueden acudir presencialmente a un Centro Zonal del ICBF, a una comisaría de familia, o a una fiscalía para presentar la denuncia. Es importante proporcionar datos como el nombre del menor, dirección, tipo de maltrato y datos del presunto agresor, si se conocen.Denunciar es un acto de responsabilidad social y legal. Toda persona que tenga conocimiento de un caso de maltrato infantil está obligada a reportarlo. El objetivo es garantizar el restablecimiento de derechos y la protección integral de la niñez colombiana.(Lea también: Saray Rojas, de 8 años, desapareció en Usme luego de ser arrastrada por el río Tunjuelo)CAMILO ROJAS, PERIODISTA NOTICIAS CARACOLX: RojasCamoCorreo: wcrojasb@caracoltv.com.coInstagram: Milografias
Martin Pistorius tenía apenas 12 años cuando su mundo cambió para siempre. Originario de Johannesburgo, Sudáfrica, siendo un adolescente contrajo meningitis criptocócica y tuberculosis cerebral, pero en un principio los síntomas fueron tomados a la ligera por los médicos y le dijeron que tenía resfriado o gripe. A pesar de lo dicho por los galenos, Martin perdió la capacidad de hablar, moverse y hacer contacto visual en cuestión de semanas.Semanas después de sus primeros síntomas, los médicos le dijeron a sus padres, Rodney y Joan, que su hijo había quedado en estado vegetativo permanente, una noticia que les rompió el corazón. Aunque los profesionales de la salud no les daban esperanzas, los padres decidieron no rendirse y siguieron cuidando, alimentando y bañando por años a su hijo. Él, mientras tanto, sufría una silenciosa agonía, consciente de lo que ocurría a su alrededor, pero sin poder dar señales de ello.Estuvo "atrapado" en su propio cuerpoMartin comenzó a recuperar la conciencia alrededor de los 14 o 15 años. Aunque podía ver, oír y entender todo lo que hacían y decían sus padres y los médicos, su cuerpo seguía inmóvil. Era un testigo silencioso de su propia existencia. “Era como estar atrapado dentro de mí mismo. Como si no existiera”, contó años más tarde.Entre los 16 y los 19 años, su lucidez era total, pero sus padres no se daban por enterados. Recuerda haber escuchado las conversaciones de sus cuidadores, sobre noticias globales como la muerte de la Princesa Diana o el ataque a las Torres Gemelas, y se desesperaba por no poder hacerles notar que él estaba ahí. “La impotencia era absoluta. Desde lo que comía hasta a dónde me llevaban, todo era decidido por otros. No tenía control sobre nada”, explicó.Uno de sus recuerdos más dolorosos fue cuando intentó mostrarle a su padre que estaba consciente. Hizo gran esfuerzo por querer mover su brazo, pero lo único que consiguió fue que su respiración aumentara de velocidad. Su padre no lo notó y siguió con su rutina.¿Cómo logró recuperarse?En una reciente entrevista con NPR, Joan, su madre, confesó que tras largos 12 años, un día le dijo a su hijo una frase creyendo que no podía escucharla: “Espero que te mueras”. No era un deseo real, pero la presión, el dolor y la incertidumbre de más de una década la estaban llevando a su límite. Martin quedó destrozado al escucharla decir eso, pero la comprendió. “Vi la tristeza en su rostro cada vez que me miraba. Entendí que solo quería alivio, para ambos”, asegura.Tras esas palabras, Martin dice que empezó a experimentar el mundo de manera diferente, también deseando acabar con el sufrimiento de sus padres. Entonces llegó a la clínica la terapeuta Virna van der Walt, quien fue la única persona en notar, tras todos esos años, que Martin estaba consciente. Aseguró que los pequeños movimientos y reacciones de sus ojos daban a entender que su mente estaba despierta, algo que confirmó al someter al paciente a nuevas pruebas cognitivas.Que su madre deseara su muerte, fue el primer paso hacia su recuperación. Martin, gracias a la terapia que sugirió Virna van der Walt, aprendió a comunicarse a través de una computadora adaptada. Con el paso de los años recuperó algo de movimiento en la cabeza y los brazos, se formó como informático, escribió un libro: 'Ghost Boy' y hasta encontró el amor en Joanna, una trabajadora social. Actualmente Martin Pistorius tiene 49 años y comparte con ilusión su desgarradora, pero inspiradora historia. Vive con su esposa y su hijo, trabaja como desarrollador web y se ha convertido en un símbolo de resiliencia humana. Su mayor deseo es que su experiencia sirva para cambiar la forma en que vemos a quienes no pueden hablar o moverse. “Aunque parezca que no hay nadie dentro… a veces sí hay alguien, esperando ser escuchado”.MARÍA PAULA GONZÁLEZPERIODISTA DIGITAL DE NOTICIAS CARACOL
El Índice de Prosperidad de HelloSafe publicó una lista de los países más ricos de Latinoamérica en 2025, entre los cuales se encuentra Colombia entre los primeros 20 puestos. De acuerdo con lo explicado por el ranking, este informe no solo usa el Producto Interno Bruto (PIB) para identificar los países más prósperos, pues también emplea otras variables: PIB per cápita, Renta Nacional Bruta (RNB) per cápita, tasa de ahorro nacional bruto, Índice de Desarrollo Humano (IDH), coeficiente de Gini y tasa de pobreza.La metodología aplicada por HelloSafe otorga distintos pesos a cada indicador: el PIB per cápita representa el 30% del total; la RNB per cápita, el 20%; el IDH, otro 20%; el coeficiente de Gini, el 15%; la tasa de pobreza, el 10%; y la tasa de ahorro nacional bruto, el 5%. Según explicaciones del mismo ranking, usar estos ítems ayuda a demostrar la riqueza de un país, cómo la distribuye y el bienestar general de la población. El país latinoamericano más rico en 2025En la edición correspondiente al año 2025, Chile aparece en el primer lugar entre los países latinoamericanos, con un puntaje de 43,19. Le siguen Uruguay (42,48) y Panamá (40,36), tres países que, pese a sus diferencias, coinciden en registrar buenos niveles de educación, cobertura en servicios públicos y políticas fiscales relativamente estables, según estableció el ranking para este año. Argentina (38,18), República Dominicana (37,39) y Costa Rica (36,39) se ubican en el cuarto, quinto y sexto lugar, respectivamente. En el caso argentino, la puntuación se explica por una combinación de ingresos relativamente altos y un IDH que se mantiene elevado, a pesar de los desafíos económicos recientes. Costa Rica, por su parte, muestra fortalezas en salud y educación, aunque sus indicadores de desigualdad afectan su desempeño global.¿Y Colombia?Colombia aparece en la posición 16 de 23 países latinoamericanos analizados, con una puntuación de 25,87. Esta cifra la ubica en la franja de países con un nivel muy bajo de prosperidad, según los criterios del índice (menos de 30 puntos). El coeficiente de Gini y la tasa de pobreza continúan siendo elevados en el país, según identificó el ranking, y el nivel de ahorro nacional no presenta cifras alentadoras. Además, la desigualdad regional dentro del país y las dificultades en el acceso equitativo a dferentes servicios, siguen afectando su desempeño en rankings internacionales. Otros países latinoamericanos que están en el rankingMéxico, con una economía más grande que la colombiana, ocupa el noveno lugar del listado, con 33,22 puntos. Le preceden países como Surinam (35,37), Guyana (34,57) y la propia República Dominicana. Brasil, a pesar de su peso económico y territorial, se sitúa en el puesto 13 con 29,57 puntos, lo que también lo ubica en el grupo de países con un nivel de prosperidad muy bajo. Los países que cierran el listado son Honduras (17,33) y Haití (16,22), cuyas dificultades estructurales, niveles de pobreza y acceso limitado a servicios básicos impactan directamente en su posición.La clasificación solo incluye países para los cuales se disponía de al menos el 90% de los datos requeridos, razón por la cual, algunas naciones como Cuba fueron excluidas, debido a la falta de información pública y actualizada. Además, el informe explica también que la aplicación de los mismos pesos a todos los países puede no reflejar con precisión las realidades nacionales específicas. Así las cosas, esta sería el listado completo en Latinoamérica: Chile UruguayPanamáArgentinaRepública DominicanaCosta RicaSurinamGuayanaMéxico Perú Jamaica EcuadorBrasilParaguayEl Salvador Colombia VenezuelaNicaraguaBelice Guatemala Honduras Haití"Los países más destacados en este ranking son Chile (43,19 puntos), Uruguay (42,48 puntos) y Panamá (40,36 puntos), que lideran en América Latina en cuanto a desarrollo. Estos países presentan altos niveles de estabilidad y políticas efectivas que favorecen una mejor calidad de vida para sus ciudadanos. México, en la 9.ª posición con 33,22 puntos, se sitúa por debajo de otros países de la región, como Costa Rica y República Dominicana, lo cual indica que, pese a ser una de las economías más grandes, enfrenta problemas estructurales que limitan su progreso en varios índices de desarrollo", indicó el informe sobre el listado en Latinoamérica. VALENTINA GÓMEZ GÓMEZNOTICIAS CARACOLvgomezgo@caracoltv.com.co
El ministro del Interior, Armando Benedetti, reaccionó al anuncio del registrador Hernán Penagos de dejar la decisión sobre el decreto de la consulta popular a manos de las altas cortes. "No está acatando el decreto. Él (Penagos) es un operador logístico, por así decirlo, no tiene por qué estar haciendo una excepción constitucional de una excepción constitucional que hizo el Gobierno. Creo que se está equivocando gravemente en eso", aseguró Benedetti a los medios de comunicación.El documento para convocar la consulta popular fue firmado la semana pasada por el presidente Gustavo Petro, lo cual ha sido rechazado por varios sectores políticos, quienes argumentan que no se está respetando la separación de poderes debido a que la iniciativa se había hundido en la plenaria del Senado el pasado 14 de mayo. Para el Gobierno Nacional, la votación de la consulta en el legislativo no fue válida debido a que no se habría leído la ponencia antes de votar. En ese sentido, el concepto de la Registraduría Nacional sobre la decisión de realizar la consulta popular por decreto era relevante, considerando que este organismo fue notificado de 44 acciones de nulidad y 97 tutelas que llegaron al Consejo de Estado contra la iniciativa. Estas se suman a las 11 demandas por inconstitucionalidad que han llegado a la Corte Constitucional.Noticia en desarrollo...