El alma y nervio del sistema de diagnóstico de Bogotá estrena equipos robóticos para robustecerse de cara al nuevo tiempo de pandemia que se avecina en la capital.
Después de entregar la muestra en el laboratorio, empieza el paso a paso con los nuevos robots.
El primero de ellos es poner la prueba en un equipo que se tarda más o menos unos 45 minutos para extraer el eluido, que es el que continúa para análisis en la prueba PCR.
En la siguiente etapa, la muestra va a los robots conocidos como termocicladores, donde se finaliza el proceso.
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Alejandro Gómez, el secretario de Salud de Bogotá, explicó los beneficios para el sistema.
“Mientras todas las universidades nos ayudaron en ese tiempo, fuimos creciendo en capacidad diagnóstica en el laboratorio distrital, sobre todo nos permitió que hoy pudiéramos hacer solamente en este laboratorio hasta 4.500 pruebas diarias; cuando empezamos hacíamos 200”, dijo.
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Gómez aseguró, además, que con estas nuevas adquisiciones la ciudad está preparada para los nuevos brotes de la pandemia.
“Nos van a llegar otros retos, probablemente un tercer pico, y tenemos después de la pandemia una cantidad de cosas que tenemos que manejar”, agregó.
Los laboratorios de las universidades también seguirán funcionando, permitiéndole a la capital procesar diariamente alrededor de 12 mil pruebas COVID-19.
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