Se conservan, sin embargo, todas las restricciones propias de la cuarentena por coronavirus.
El 5 de marzo pasado, la Alcaldía de Bogotá decretó la alerta amarilla debido al aire contaminado en Bogotá.
Casi un mes después, el Distrito anuncia que la calidad del aire mejoró 81% y la tendencia es positiva.
“Las condiciones meteorológicas de la última semana en el país, en especial las lluvias presentadas en la Orinoquía, así como el cambio en la dirección e intensidad de los vientos, hicieron que el material particulado producto de los incendios forestales no fuera transportado hacia la ciudad. Estos factores favorecieron considerablemente la dispersión local de contaminantes”, informó la Secretaría de Ambiente.
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A estas condiciones climáticas favorables también se sumó la cuarentena en Bogotá, que ha generado una disminución en la emisión de contaminantes.
Pese a levantar la alerta amarilla, el Distrito pidió “a los industriales que utilicen tecnologías limpias en sus procesos de producción” y a la ciudadanía “reducir el uso del vehículo particular”.
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Tenga en cuenta que se mantienen las restricciones propias del aislamiento obligatorio.