La queja constante de los padres de familia de Santa Fe de Antioquia ya fue escuchada. Por ello, a partir de esta semana, los lupanares que no cuenten con sus papeles en regla y se encuentre a menos de 300 metros de un establecimiento educativo, serán cerrados de forma definitiva.
El primer establecimiento de este tipo sellado por la Alcaldía estaba ubicado en el barrio Santa Lucia, a menos de cien metros del colegio principal.
Según Wilson Luis Gallego, docente de dicho plantel, este lugar daba muy mal ejemplo e imagen a los niños y jóvenes.
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A esto se suma que los malos comportamientos a las afueras del lugar, así como la música a todo volumen y la imagen de inseguridad del sector.
Con estas medidas la administración local también quiere combatir flagelos como la prostitución de menores de edad y la circulación de este tipo de población cerca a burdeles.
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“Estas casas de lenocinio no pueden estar a menos de 300 metros de distancia de una institución educativa”, manifestó Claudia Holguín, secretaria de Gobierno de Santa Fe de Antioquia.
La funcionaria quien añadió en los próximos días serán cerrados otros prostíbulos a pocos metros de La Variante, uno más por el barrio El Llano y otro cerca a otro colegio.
Los administradores de estos lugares tienen 30 días para que reubiquen el establecimiento, de lo contrario serán acreedores de multas.