En el Instituto Tecnológico más de 600 personas no solo reciben ayuda, también se sienten seguros. La Iglesia pentecostal única también les da la mano.
En el Instituto Tecnológico de Putumayo más de 600 damnificados buscaron primero al padre Omar para refugiarse.
"Tenemos el de arriba y ahora el de abajo que nos está dando la ayuda en la buena y en la mala", dice María Benítez, damnificada de la avalancha.
Dicen que tienen una razón para no querer salir de allí.
"Aquí nos sentimos seguros...si vuelve otra avalancha hasta aquí no va a llegar", dice Sandra Rozo, otra de las afectadas.
Por su parte, la Iglesia pentecostal única de Colombia es hoy el albergue El buen samaritano.
“Los hacemos con mucho cariño, personas en todo el país que hacen parte de la comunidad cristiana se han movilizado, han enviado ayudas. Han sido muy lindos, muy generosos”, explica el pastor Caleb Ordúz.
Pero también hay afectados como esta pareja que se niega a dejar su vivienda a pesar de que el barro les llegó hasta la mitad de la casa.
"Y si no tranco toda con esta puerta todo ese barrial estaría ahí adentro. ¿Lo salvó esa tabla? Clarinete no solo esta sino aquí la puerta y estas tablas", señala Juan Díaz.
Mientras algunos remueven el lodo de sus puertas para recuperar lo poco que les queda, los albergues atienden a 2500 damnificados.
Updated: abril 07, 2017 09:10 p. m.