Una inesperada avalancha atrapó a Audry y su esposo cuando escalaban, lo que le produjo una hipotermia. Un milagro médico le devolvió la vida.
Audry Mash, una mujer de origen británico residente en España, escapó por poco de la muerte.
Se encontraba con su esposo practicando montañismo en la región del Pirineo en Nuria, cuando los sorprendió una tormenta de nieve.
Habían revisado las condiciones meteorológicas antes del ascenso y estas no acusaban ningún riesgo. Sin embargo, estando arriba, a poco de alcanzar la cumbre, todo se volvió blanco. La espesa nieve no les permitía ver y las ventiscas aumentaban el riesgo de una caída, panorama que los obligó a resguardarse en una piedra.
Poco a poco Román Schoeman, su esposo, notaba cómo Audry se iba desvaneciendo hasta que perdió la conciencia. Estaba convencido de que había muerto.
Ante la demora en el regreso de la pareja, unas amigas que en último momento decidieron no ir con ellos avisaron a las autoridades que estaban desaparecidos. Tres helicópteros, cuatro ambulancias y unas cuarenta personas participaron del rescate.
Audry, de 34 años, llegó con hipotermia al hospital Vall d'Hebron, donde sufrió un paro cardíaco. Su corazón se detuvo y el equipo médico inició una compleja maniobra para salvarla conectándola a una máquina que suple la función de este órgano vital y de los pulmones. Le extrajeron sangre para oxigenarla y se la volvieron a introducir, a mayor temperatura, para así calentar su cuerpo.
Estaba azul y pocos creían que podía sobrevivir. Pasó seis horas con el corazón detenido, pero de un momento a otro, increíblemente, volvieron los latidos.
Y lo más sorprendente, Audry no sufrió daño neurológico. Incluso, salió del hospital caminando.
“Estoy feliz, estoy viviendo. Es el mejor regalo que puedo tener”, dijo.
Un milagro de la vida que hoy no se cansa de agradecer.
Updated: diciembre 05, 2019 02:59 p. m.