Las autoridades informaron que un joven de 25 años, que había sido trasladado a la Clínica Somer, falleció por las heridas que sufrió a causa de la explosión en Rionegro, Antioquia, en una casa que, según las denuncias, funcionaba como polvorería ilegal.
Jorge Peláez, dueño de una veterinaria afectada por la onda expansiva, contó que la persona fallecida les colaboraba por días. “Es muy doloroso todo lo que está pasando”, afirmó. Agregó que varias mascotas huyeron por la emergencia y por eso pidió ayuda para localizarlas.
Las imágenes de la destrucción por la explosión en Rionegro, Antioquia, son impresionantes. Dos personas murieron y 21 más resultaron heridas por la emergencia que se produjo en lo que, según ciudadanos, era una polvorería ilegal y de la que las autoridades sacaron, en dos camiones, alrededor de dos toneladas de material para juegos pirotécnicos.
Llamó la atención que, tras la detonación, en ese inmueble quedó en pie la imagen de una Virgen, pero cinco viviendas quedaron arrasadas o con inminente riesgo de desplomarse.
Rodrigo Cardona, testigo de la explosión en Rionegro, contó que segundos antes, “cuando salí a entregar un pedido sentí que algo nos sacudió, cuando miramos, una explosión grandísima, cuando vi volar palos y palos y cosas. Lo que pasó fue una explosión maluca”.
Los residentes de las viviendas aledañas a donde se produjo la emergencia fueron ubicados temporalmente en el Coliseo Iván Ramiro Córdoba y, para proteger sus casas de los dueños de lo ajeno, sellaron las puertas con cintas y cadenas.
Aníbal Gaviria, gobernador de Antioquia, que llegó a la zona para ponerse al frente de la situación, informó que había “22 personas que han sido valoradas desde el punto de vista médico, de ellas 12 ya han sido dadas de alta, algunas aquí en el lugar, y han sido trasladadas a centros médicos -aquí en Rionegro a la Clínica San Juan de Dios en sus dos sedes y a la Clínica Somer- 10 personas heridas”.
De las personas hospitalizadas, tres se encuentran en condición crítica y una de ellas falleció en las últimas horas.
Pese a la magnitud de la emergencia, el gobernador Gaviria destacó que “no hay personas bajo los escombros. Gracias a Dios no han reportado a ningún desaparecido”.
Mientras tanto, los ciudadanos han acudido a los centros médicos para donar sangre a las víctimas de la explosión en Rionegro.
Denuncian, además, que ya habían alertado de la presencia de juegos pirotécnicos en la casa donde se produjo la emergencia y que si se hubieran tomado medidas a tiempo no estarían viviendo esta situación.
Aún no han entregado un balance de los vehículos afectados por la explosión en Rionegro.
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