¿Quién fue el joven que increpó a Uribe durante el debate de víctimas en el Congreso?

Su nombre es Iván Marquez Casteblanco y trabaja con la representante Angélica Lozano. De 268 legisladores invitados, solo 35 escucharon a las víctimas.
El rifirrafe entre uribistas y críticos del mandatario empañó el Día de las Víctimas en Colombia.
La agria disputa se desató cuando el expresidente Uribe fue acusado por Gloria Gaitán y le negaron una réplica inmediata. Disgustado, abandonó la sesión y enfrentó a críticos en el camino a la plaza de Bolívar.
Allí, estaba Márquez, quien le hizo varios señalamientos, entre ellos el perseguir a la Corte Suprema.
El presidente del legislativo defendió la decisión tomada por el representante Miguel Ángel Pinto, que encabeza la Cámara. Mauricio Lizcano aseguró que se trató de una decisión protocolaria, ya que únicamente después de que se pronunciaran las víctimas hablarían -ahí sí- los congresistas.
“La sesión es para escuchar a las víctimas, de todas maneras, cuando pasaran todos, los senadores podían hablar”, declaró Lizcano.
Uribe abandonó el recinto junto a los demás congresistas del Centro Democrático, alegando que le supuestamente le habían vulnerado el derecho a la réplica.
En los pasillos del Congreso, el expresidente y su bancada se enfrentaron a críticos. Posteriormente, en la plaza de Bolívar, Uribe expuso su visión sobre el tema de las víctimas.
“Vagos, estudien”, gritó la representante María Fernanda Cabal a un grupo de personas que le gritaban “asesinos” a los integrantes del uribismo.
El exmandatario hizo llegar a Noticias Caracol un comunicado en donde aseguró, entre otras cosas, lo siguiente: "Mal síntoma para nuestra democracia que cuando uno quiere hablar de frente en el Congreso, en el ejercicio elemental del derecho de réplica, lo impidan, y que se impongan los gritos de aliados del gobierno promotores de la impunidad de las FARC que se hacen propaganda con el noble tema de las víctimas”.
Para muchos, resultó doloroso que la lamentable escena de gritos e insultos cobrara más importancia que el mismo debate. Las víctimas hacia el final de la tarde sólo fueron escuchadas por cerca de 35 congresistas de los 268 que habían sido citados.