El galán de Hollywood pudo haber cobrado millones por prestar su imagen, pero el pago fue más sencillo de lo que los productores pensaban.
Pitt aceptó estar en la película del antihéroe a cambio de una taza de café. Sí, una simple taza.
Ryan Reynolds, el hombre que le da vida a Deadpool, explicó cómo fue esa situación:
"Me dijeron que lo único que quería -Pitt- era un café y yo me vi obligado a preguntar: '¿Se refiere a una franquicia de cafeterías o a una sola taza de café?'. Resultó que era solo una taza, lo que en realidad era su manera de decirnos que lo iba a hacer gratis. Se trató de un gran favor y lo más bonito que alguien podía haber hecho por nosotros", dijo en la reciente Comic-Con de San Diego.
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