El pequeño de cinco meses había sido dejado boca abajo y logró resistir una fría noche en las montañas de Nevada, EE. UU. Un sheriff escuchó su llanto.
El niño, protegido solo con un mameluco mojado y sucio, había sido dejado debajo de una pila de palos y escombros. Estuvo solo y sin ayuda por al menos 9 horas y sobrevivió a temperaturas bajaron hasta los 7 grados.
Fue descubierto por un equipo de rescate del condado de Missoula.
La búsqueda del pequeño inició luego de que la oficina del sheriff recibiera una llamada por el extraño comportamiento de un hombre, que amenazaba a la gente y aseguraba que tenía un arma.
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Cuando los uniformados llegaron a interrogarlo el hombre se había ido pero los uniformados comenzaron a rastrear sus pasos, pues se conoció que un bebé que estaba bajo su cuidado no había sido visto por varias horas.
Una nueva llamada reportó que el individuo, que se encontraba bajo la influencia de drogas, había reaparecido y al ser interrogado señaló que el niño “estaba enterrado posiblemente en algún lugar de las montañas”.
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De inmediato varios equipos de búsqueda fueron hasta la zona para buscarlo.
Por más de seis horas caminaron los bosques. Uno de los policías de pronto escuchó un llanto y siguiendo el sonido encontró al bebé hacia las 2:30 a.m. Es decir, unas nueve horas después de ser abandonado, solo en el bosque en una fría noche.
“Esto es lo yo llamo un milagro”, señaló el sheriff.
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El niño tenía algunos raspones y moretones, pero al parecer se encuentra bien.
El hombre que lo enterró fue identificado como Francis Carlton Crowley, quien fue detenido y acusado de varios delitos.
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No era clara la razón por la que el individuo tenía al bebé al cuidado y cuál es su relación con el pequeño.