El caso de una mujer que lloró la muerte de sus dos bebés dio un giro inesperado tras una nueva pista.
Stephany E. LaFountain, estadounidense de 23 años, se hizo tristemente célebre por su doble tragedia familiar.
En septiembre de 2015, la mujer llamó a la línea de emergencia porque su hija de 4 meses había dejado de respirar. Aunque la pequeña fue atendida de urgencias, falleció en el hospital.
Y la historia se volvió a repetir en noviembre de 2017: Stephany contactó a los servicios de emergencia porque su bebé, de 13 meses, no respiraba. Pese a la atención clínica, murió cuatro días después.
Se pensó, entonces, que la familia LaFountain, que vive en Alaska, era la protagonista de un trágico accidente.
Sin embargo, las autoridades tuvieron sospechas sobre la manera cómo habían fallecido ambos bebés.
Por eso comenzaron las pesquisas y, en una de estas, revisaron el historial de búsqueda en internet de la mujer; allí encontraron consultas como: ‘mejores maneras de ahogar’, ‘Cómo matar a un ser humano sin dejar pruebas’, ‘Cómo cometer el crimen perfecto’, ‘¿Puede al ahogamiento salir en una autopsia?’, entre otras.
Una vez se conocieron los estremecedores registros, Stephany E. LaFountain fue capturada por las autoridades.
“Son dos bebés asesinados por su mamá”, aseguró Eric Jewkes, jefe del departamento de Policía en Fairbanks, Alaska.
Según medios locales, que conocieron historias clínicas, los dos bebés se encontraban en perfecto estado de salud antes de los episodios fatales.
Ahora la mujer deberá ir a la corte para conocer su sentencia.