En un pequeño pueblo de Connecticut, Estados Unidos, la colombiana Nathalie Jacob y su esposo Simon Gilbert reconstruyeron su vida tras una experiencia que los cambió para siempre. Ella, una colombiana exitosa, políglota, con una maestría en Administración de Empresas y una carrera brillante en diferentes multinacionales, pasó de liderar equipos y manejar finanzas a no poder escribir su nombre ni reconocer los números. Todo comenzó con un accidente aparentemente inofensivo mientras esquiaba, pero terminó revelando un diagnóstico que cambiaría su vida para siempre: un tumor cerebral.“Iba bien rápido, sin casco, no me pasó nada, pero por si acaso cuando regresé a Miami me fui a revisar el dedo porque el dedo lo tenía morado”, relató Nathalie a Los Informantes en el 2023. Lo que parecía una simple revisión médica terminó en una noticia inesperada: “tienes un meningioma intraventricular, recomendamos que te lo quites lo más rápido posible porque está creciendo”, recordó.La cirugía fue programada con rapidez. El pronóstico era optimista: recuperación en tres semanas, bajo riesgo de complicaciones. Pero la realidad fue otra. “Entré esa cirugía y cuando me desperté no podía leer, no podía escribir, no podía sumar dos más dos, no podía parar de reírme porque yo estaba yo ahí sentada en la cama y no podía ni siquiera escribir mi nombre”, contó.En el cerebro de una niña de ocho añosLa operación, que debía ser un procedimiento sin mayores complicaciones, le dejó secuelas profundas. Nathalie despertó con una desconexión total de sus habilidades cognitivas. “Me dan un lápiz y me dicen que escriba mi nombre y yo dibujo un círculo”, recordó. Su percepción del mundo se alteró por completo: “me dicen ‘¿qué número tiene esa puerta?’ y yo ‘ocho’, entonces me llevan al siguiente cuarto y me dicen ‘¿y ese?’ y yo ‘ocho’”.Ese número, el ocho, se convirtió en símbolo de su nueva vida. “Por eso el título de mi libro es 8: redescubriendo la vida después de un tumor cerebral”, explicó. En numerología, el ocho representa nuevos comienzos, y para Nathalie, fue exactamente eso: un renacer.“El cerebro se convirtió en cerebro de una niña de dos años y fue espectacular porque era ver la vida como una niña de dos años, yo lo único que quería era que me dieran libros para colorear y durante horas yo coloreaba feliz”, relató.La vida después de la cirugíaSimon, su esposo, quedó en shock al verla salir del quirófano. Ella, una mujer que hablaba tres idiomas, tenía una maestría y había vivido en más de cinco países ahora no podía reconocer su entorno ni caminar sin tropezarse. “Recién llegaba a la casa me estrellaba con todas las paredes, no podía servir una taza de agua, me caía en un escaloncito”, recordó Nathalie.Además de perder habilidades cognitivas, perdió parte de su visión. “Los ojos están perfectos, es el cerebro que no reconoce que ve, entonces yo no veo nada con los dos ojos hacia la derecha”, explicó. Esta condición, conocida como hemianopsia, la dejó con una discapacidad invisible pero profundamente limitante.El síndrome raro y la lucha por reaprenderLo que Nathalie experimentó fue un síndrome neurológico extremadamente raro. “Es como un síndrome que pasó después de la cirugía y es algo extremadamente raro o exótico que pase”, afirmó. Este trastorno afectó su lenguaje, su capacidad para hacer cálculos simples y hasta su orientación espacial.Pero Nathalie no se rindió. Se obsesionó con reaprender, letra por letra, lo que su cerebro había olvidado. “Con mucho esfuerzo logré volver a escribir y a leer otra vez, pero después llega un tiempo donde uno tiene una curva de recuperación, pero llega a un techo que ya no recuperas más”, explicó. Aunque logró sumar, nunca pudo volver a multiplicar ni dividir.De la independencia a la dependenciaLa pérdida de sus habilidades cognitivas también significó un cambio radical en su vida profesional y personal. “Perder mi cerebro era perder esa independencia”, confesó. De ser la principal proveedora del hogar, pasó a depender económicamente de su esposo. Su rol en la familia cambió, y con ello, su identidad.Aunque físicamente parece recuperada, su cerebro se fatiga con facilidad. Tareas simples pueden convertirse en desafíos abrumadores. Aunque se le vea moverse de un lado al otro, su cerebro se fatiga con facilidad y algo muy sencillo se le convierte en una tormenta.La maternidad, un nuevo motor de su vidaEn medio de la adversidad, Nathalie encontró una nueva motivación: su hija. La maternidad, lejos de ser un obstáculo, se convirtió en un nuevo e inspirador propósito. Natalie convirtió su discapacidad en una oportunidad para tener más tiempo con su hija y también para ayudar a otros.Nathalie decidió compartir su historia, sin miedo a mostrar sus debilidades. Creó grupos de apoyo en Facebook que hoy reúnen a más de 10.000 personas. También da charlas y entrevistas, y escribió un libro para que su hija, algún día, entienda todo lo que vivió.“Haber pasado por una experiencia así es tremenda lección de humildad, entonces descubrí que lo que me gusta y lo que me hace feliz hoy en día es ayudar a las otras personas”, concluyó.La historia de Nathalie Jacob es recordatorio de que, incluso cuando la vida se vuelve un ocho, siempre hay una forma de volver a empezar.
La desaparición de Tatiana Hernández, estudiante de Medicina de 23 años, sigue siendo un misterio que conmueve a Cartagena y al país entero. Desde el 13 de abril, cuando fue vista por última vez saliendo del Hospital Naval en el barrio Bocagrande, su familia no ha dejado de buscarla. Ahora, más de un mes después, la Fiscalía ha entregado a sus familiares los dispositivos electrónicos que fueron sometidos a análisis forense en Bogotá: dos celulares, un computador portátil y una tablet.Según informó el diario El Tiempo, los equipos permanecieron durante semanas en un laboratorio del CTI, donde expertos en informática forense extrajeron una cantidad considerable de información: una tera en total. Sin embargo, hasta el momento, los resultados de ese análisis no han sido compartidos con la familia.“Solo sabemos que en el laboratorio dicen que encontraron en total una tera de información. Aún no nos han entregado los resultados, se supone que tienen que enviar esos hallazgos devuelta a la Fiscalía de Cartagena”, dijo Lucy Díaz, madre de Tatiana, al periódico.¿Qué contiene ese tera de información?De acuerdo con los investigadores citados por El Tiempo, en la copia forense de los dispositivos hay mensajes, chats, fotos y contactos que están siendo revisados cuidadosamente. La búsqueda se ha centrado especialmente en las últimas llamadas y comunicaciones que Tatiana pudo haber tenido antes de desaparecer.Los dispositivos fueron trasladados a Bogotá con el objetivo de cruzar la información digital con los testimonios recogidos por las autoridades. La esperanza es que entre esos datos pueda haber alguna pista que permita reconstruir los últimos movimientos de la joven o identificar a personas clave en su entorno.El hallazgo del segundo celularUno de los elementos que más llamó la atención en el proceso de recolección de pruebas en este caso fue el hallazgo de un segundo celular en la habitación de Tatiana Hernández tras una inspección luego de su desaparición. La existencia de este dispositivo fue confirmada por su madre a Los Informantes, quien explicó que se trataba de un aparato sin tarjeta SIM, que ella misma le había entregado a su hija tras un robo ocurrido en Bogotá.“Entonces es cuando el señor me dice que esa misma noche fueron a la habitación donde estaba Tatiana a revisar qué encontraban y encontraron su computador, su tablet. Se sorprenden porque encuentran un segundo celular. El investigador me dice, ‘¿Tiene conocimiento de que su hija utilizaba dos celulares?’ Yo le digo, ‘Sí, señor’”, relató Lucy Díaz en entrevista con la Nena Arrázola en el informativo de Caracol Televisión.Este segundo celular, aunque aparentemente no estaba en uso activo, también fue incluido en el análisis forense. Lo hallado, al igual que en el resto de los dispositivos, permanece bajo reserva.Una desaparición sin pistas clarasTatiana Hernández desapareció el domingo 13 de abril. Ese día, su madre le llevó el almuerzo al hospital donde hacía su internado. “Ella salió corriendo, me recibió el paquete y fue de afán”, contó Lucy. Horas más tarde, el novio de Tatiana, David Espitia, al no recibir respuesta a unos mensajes que le había enviado horas tardes decidió comunicarse con Sara, una compañera de ella, quien le comentó que Tatiana había salido, pero que iría a buscarla.Más tarde, David recibió una llamada de Sara quien le contaba que habían encontrado las sandalias y celular de la joven médica en los espolones, una zona costera de Cartagena donde solía caminar con sus colegas, pero no había rastro de ella, por lo cual decidió alertar a los padres de Tatiana.Desde entonces, no se ha sabido nada más de ella. La familia ha recorrido barrios, pegado volantes, organizado marchas y hablado con medios de comunicación. La angustia no ha disminuido, pero tampoco la esperanza.“Tatiana está viva, está en un lugar oculto. Tengo la esperanza y la ilusión que de pronto esté también ayudando a la gente en su estado de médico”, dijo su madre.¿Quién es el novio de Tatiana Hernández?David Espitia, abogado de 26 años, ha estado presente desde el primer momento. Al día siguiente de la desaparición, tomó un vuelo desde Bogotá y se unió a la búsqueda. “Ella va a volver y todo esto va a ser un capítulo que es una pesadilla, pero que vamos a superar todo esto”, dijo en entrevista con Los Informantes.David relató que ese día hablaron al mediodía. Tatiana le dijo que iba a estudiar y luego almorzar. Después, no volvió a responder. “Tata es una persona que es muy responsable. Si ella salía, les avisaba a las amigas o a la señora Lucy. En su defecto, también me decía a mí ‘voy a ir a tal lado’”, explicó.La Fiscalía no ha emitido comunicados oficiales sobre los avances de la investigación. La familia, por su parte, sigue aferrada a la posibilidad de encontrarla con vida.
Lucy Díaz no imaginó que aquel domingo, cuando llevó el almuerzo al Hospital Naval de Cartagena, sería la última vez que vería a su hija Tatiana Hernández. “Ella salió corriendo, me recibió el paquete y fue de afán”, le contó a la periodista la Nena Arrázola de Los Informantes. Era 13 de abril. Tatiana, estudiante de Medicina de 23 años, estaba en su internado. Nada parecía fuera de lo común.Horas después, en la noche, una llamada desde Bogotá cambió todo. David Espitia, el novio de Tatiana, preguntó si estaba con ellos. No lo estaba. “Me dijo ‘no, es que acabo de hablar con una compañera de ella y Tatiana está extraviada, me acaban de decir que encuentran sus sandalias y su celular en un lugar de la playa, pero ella no está’”, relató Lucy.El primer hallazgo: sandalias y un celular junto al marTatiana solía caminar por los espolones, una zona costera donde ella y sus compañeros iban a despejarse tras largas jornadas médicas. Allí fue vista por última vez. En el lugar encontraron sus sandalias y su celular. Pero no había rastro de ella.“Era un domingo, ya no había mucho turista, ya eran las 9, 10 de la noche, nos dieron las 2 de la mañana y nos fuimos al parque de la Marina y al son de hoy no tenemos información del paradero de Tatiana”, contó su madre.Desde entonces, la búsqueda ha sido incansable. Lucy y toda la familia de la joven médica Tatiana Hernández reparte volantes, organiza marchas y recorre barrios de Cartagena. La incertidumbre la acompaña, pero también la esperanza.El hallazgo del segundo celularTras el reporte de la desaparición, la Fiscalía revisó la habitación de Tatiana. Allí encontraron su computador, su tablet y un segundo celular. El hallazgo sorprendió a los investigadores, quienes preguntaron a Lucy: “¿Tiene conocimiento de que su hija utilizaba dos celulares?”. Su respuesta fue que sí.“A ella me la robaron en Bogotá, un mismo celular del que ella tiene en este momento y para que no volviera a pasar ese susto, yo le di una carcasa que no tiene ni siquiera SIM card”, explicó la madre.Ese segundo celular, sin tarjeta SIM, también lo tiene en su poder las autoridades.El primer celular fue entregado por Lucy a los investigadores. Aunque no conocía la clave, sus compañeras sí. “Yo tengo la clave. Yo tengo la clave”, dijeron. ¿Por qué sabían la contraseña? Lucy no lo sabe, según relató en Los Informantes.“Nos preguntan, ‘¿Quién de ustedes tiene el celular de Tatiana?’ Y las dos me señalan: ‘ella’. Y yo le dije, ‘Ah, sí, claro. Sí, señora, aquí está. No conozco su clave, no tengo nada, entonces no sé cómo pueden revisarlo’”, relató.Ambos celulares están ahora en manos de la Fiscalía. Aunque no se ha revelado qué información contienen.Lucy Díaz no ha parado de buscar a su hija. Cree firmemente que ella está viva. “Tatiana está viva, está en un lugar oculto. Tengo la esperanza y la ilusión que de pronto esté también ayudando a la gente en su estado de médico”, dice.Su teoría es que fue llevada por bandidos para atender a alguien herido.Continúa la búsqueda de Tatiana HernándezDavid Espitia, abogado de 26 años, es el novio de Tatiana. Al enterarse de su desaparición, tomó el primer vuelo a Cartagena. Desde entonces, ha caminado junto a la familia por toda la ciudad. Lo que iba a ser unos días de descanso y ayudarle a empacar sus cosas porque pronto regresaban a Bogotá se fue convirtiendo en un calvario.Él recuerda con claridad el último día que hablaron. “Ese día, nosotros hablamos sobre el mediodía tal vez y me dice, ‘amor, voy a estudiar y después voy a almorzar’”. Pasadas las horas, intentó contactarla, pero no obtuvo respuesta. Fue entonces cuando escribió a Sara, una compañera de Tatiana. “Sara me dice, ‘Ella salió, pero ya voy a buscarla’. Ya en una llamada que me hace Sara me dice ‘encontré las sandalias y encontré el celular, están aquí, están al lado del mar y me cuelga’”.David y Tatiana tenían planes. Hablaban todos los días. Ella iba a regresar a Bogotá después de Semana Santa. “Tata es una persona que es muy responsable. Si ella salía, les avisaba a las amigas o a la señora Lucy. En su efecto también me decía a mí ‘voy a ir a tal lado’”, relató.Tatiana estaba a punto de graduarse. Su pasión era la ortopedia, aunque también le interesaba la cirugía. Estaba feliz con su internado en el Hospital Naval. Tenía sueños, metas, una vida por delante.Hoy, su historia mantiene en vilo a todo un país. “Ella va a volver y todo esto va a ser un capítulo que es una pesadilla, pero que vamos a superar todo esto”, dijo David, su novio. Mientras tanto, la familia de Tatiana Hernández no se detiene en sus esfuerzos por encontrarla.
David Espitia recuerda claramente la última vez que tuvo contacto con Tatiana Hernández. Fue un domingo, 13 de abril de 2025, al mediodía. Ella, como siempre, estaba en el Hospital Naval de Cartagena, cumpliendo con su internado médico.“Amor, voy a estudiar y después voy a almorzar”, recordó que le dijo, un mensaje breve, cotidiano, como tantos otros. Lo que no sabía es que sería el último, hasta ahora.Tatiana de 23 años, estaba a punto de graduarse como médica y soñaba con especializarse en ortopedia. Vivía en Cartagena desde hacía varios meses, donde hacía sus prácticas clínicas. Su vida transcurría entre guardias, rondas médicas y caminatas al atardecer por el malecón. Era responsable, metódica, y siempre avisaba a dónde iba. Por eso, cuando dejó de responder, David supo que algo no estaba bien.“Ella se desconecta 2, 3 horas… pero ese día ya pasaban 5”, afirmo a la Nena Arrázola de Los Informantes.David, abogado de 26 años, estaba en Bogotá. La distancia no era un obstáculo para su relación: hablaban todos los días, compartían planes, se acompañaban a través de mensajes y llamadas. “Ella se desconecta 2, 3 horas, yo decía como pues eso es lo que normalmente ella hace, pero ese día ya pasaban 4 o 5 horas y yo digo igual voy a escribirle a ver si almorzó al fin, si no, le escribo a ella y no me contesta”.La preocupación creció. Intentó contactarla de nuevo. Nada. Entonces le escribió a Sara, una compañera de Tatiana. “Le digo como ‘oye, ¿tú sabes algo de Tata?’ Y Sara me dice, ‘Ella salió, pero ya voy a buscarla’”.Minutos después, Sara lo llamó. “Encontré las sandalias y encontré el celular, están aquí, están al lado del mar”, alcanzó a decir antes de colgar.La desaparición de Tatiana HernándezHoras antes, doña Lucy Díaz, madre de Tatiana, había ido al hospital a llevarle el almuerzo. “Llegué al hospital, la llamé, le dije ‘mami, estoy afuera del hospital, sales y me recibes que te traje el almuerzo’, y ella salió corriendo, me recibió el paquete y fue de afán”, contó. Esa fue la última vez que la vio.A las 8 de la noche, David llamó a la familia para preguntar si la joven médica se encontraba con ellos. La respuesta fue no. “Me dijo ‘es que acabo de hablar con una compañera de ella y Tatiana está extraviada, me acaban de decir que encuentran sus sandalias y su celular en un lugar de la playa, pero ella no está’”, relató doña Lucy.La intensa búsqueda de la familiaDavid viajó a Cartagena. Lo que iba a ser una visita para ayudarle a Tatiana a empacar sus cosas, pues su internado estaba por terminar y planeaban regresar juntos a Bogotá después de Semana Santa, se convirtió en una búsqueda desesperada.Han caminado por toda la ciudad. No hay barrio que no hayan visitado. Repartieron volantes, han hecho marchas, preguntaron a las autoridades y han contado su historia en todos los medios de comunicación, pero aún no hay rastro de ella.“Tata es muy responsable. Siempre avisa”Tatiana Hernández no era de desaparecer. “Si ella salía, les avisaba a las amigas o a la señora Lucy. En su efecto también me decía a mí ‘voy a ir a tal lado’”, explicó David. Por eso, la hipótesis de que se haya ido por voluntad propia nunca tuvo sentido para su familia.La última vez que fue vista, según testigos, fue cerca del mar. Un lugar que solía frecuentar con sus compañeros para despejarse. “Cuando están un poco congestionados de temas y cosas, iban a la playa a mirar el atardecer, tomaban fotos, respiraban y volvían al lugar”, contó su madre.Un caso sin respuestasDesde el 13 de abril, no hay rastro de Tatiana. La Policía y la Fiscalía no han dado con su paradero. La hipótesis de que está en el mar es la que tiene más fuerza. Sin embargo, son cientos de testimonios que tienen las autoridades y varias pruebas documentales que podrían inclusive abrir nuevas líneas de investigación.Mientras tanto, la familia sigue buscando. “Nos dieron las 2 de la mañana y nos fuimos al parque de la Marina”, recordó la madre sobre el primer día de búsqueda.Doña Lucy no ha parado. Va de barrio en barrio, reparte volantes, organiza marchas. La ansiedad se le nota y no la esconde. “Ella va a volver y todo esto va a ser un capítulo que es una pesadilla, pero que vamos a superar todo esto”, concluyó David.
Nairo Quintana ha sido protagonista en el Giro de Italia 2025. Prueba de ello fue lo realizado el pasado miércoles 21 de mayo, en la etapa 11. Allí, entre Viareggio y Castelnovo ne' Monti, 'el Cóndor' hizo parte de la fuga, junto a Lorenzo Fortunato (XDS Astana Team), Pello Bilbao (Bahrain - Victorious), Wout Poels (XDS Astana Team) y Luke Plapp (Team Jayco AlUla), luchando por la victoria.Finalmente, no se le dio y quien se impuso fue Richard Carapaz (EF Education EasyPost), luego de ser 'cazados' por el grupo principal. Sin embargo, el esfuerzo del 'escarabajo' tuvo su recompensa y así lo informó Georgina 'Goga' Ruiz Sandoval, en la transmisión de la jornada 12. "Le dieron el combativo a Nairo Quintana. Qué bueno. Tiene el número rojo. Gracias a la votación popular", dijo.Pero no fue lo único y, en Caracol Sports, Jhon Jaime Osorio complementó. "Lo de Nairo fue interesante porque consiguió el esprint, sumó puntos en la montaña y, de hecho, de los que iban en la fuga, se mantuvo en el grupo y llegó a solo 20 segundos. Al final se descolgó en la llegada, pero se mantuvo al paso de ese lote líder que iba al frente", expresó, destacando la labor del boyacense.Eso sí, no todo fue alegría. Dichos comentarios los hicieron, cuando faltaban poco más de 113 kilómetros para la meta, en Viadana (Oglio-Po). Y es que, en ese momento, Nairo Quintana bajó hasta el carro del Movistar Team a buscar una chaqueta, teniendo en cuenta que estaba lloviendo y para volver a conectar con el grupo principal, realizó una maniobra que está prohibida en el ciclismo."Cuidado porque los van a sancionar a estos porque se albergaron más de lo normal, pegados al auto. Los va a sancionar el comisario, quien ya debe estar viendo el video. Si no se retiran ya, se va a venir un castigo. Si fue una asistencia mecánica está bien, una pequeña ayuda no hay problema y se perdona, pero no pueden estar detrás del vehículo", comentó 'Goga' sobre este tema.Y finalizó diciendo que "no hay necesidad porque te quitan puntos UCI y no se justifica por un castigo como este". Recordemos que ningún ciclista puede hacer trascoche porque estaría sacando una ventaja, al cortar el viento en contra y aumentar su velocidad, lo que le facilita alcanzar al pelotón que era la finalidad, en este caso, para Nairo Quintana y los otros dos que estaban con él.
Mark Zuckerberg comienza su día a las 8:00 a.m., una hora que puede parecer tardía para un CEO de Silicon Valley, pero que responde a una lógica clara, eficiencia sin sacrificar descanso. Lo primero que hace al despertar es revisar su teléfono, donde se pone al tanto de lo que ocurre en Facebook, WhatsApp y Messenger. Este primer contacto con sus plataformas le permite tener una visión inmediata del pulso global y de los temas que podrían impactar a Meta ese día.Después de este chequeo digital, Zuckerberg se enfoca en su bienestar físico. Tres o cuatro veces por semana entrena artes marciales mixtas (MMA) y jiu-jitsu, una práctica que ha reemplazado su antigua rutina de correr. Este cambio no solo responde a una búsqueda de mayor condición física, sino también a una forma de liberar tensiones y mantenerse mentalmente enfocado. Su dieta acompaña este ritmo: consume alrededor de 4.000 calorías diarias para sostener su nivel de actividad.Una vez finalizado el entrenamiento, se ducha y desayuna algo simple, sin dedicar tiempo a decidir qué comer. Esta filosofía de minimizar decisiones también se refleja en su vestimenta: todos los días usa una camiseta gris, jeans y zapatillas. Aunque parezca austero, sus camisetas son de la marca italiana Brunello Cucinelli, lo que revela una preferencia por la calidad sin ostentación.Cómo organiza su jornada laboral en MetaZuckerberg trabaja entre 50 y 60 horas semanales, distribuidas en bloques bien definidos. Su agenda está diseñada para maximizar el impacto de cada reunión y decisión. Prepara cada encuentro con antelación y dedica tiempo a los seguimientos posteriores, lo que le permite mantener un ritmo constante sin perder foco. Manejar esta estructura le permite liderar una de las compañías tecnológicas más influyentes del mundo sin caer en el caos operativo."Dedico mucho tiempo a leer y reflexionar sobre las cosas por mi cuenta", continuó. "Si contamos el tiempo que paso en la oficina, probablemente no sean más de 50 o 60 horas a la semana. Pero si contamos todo el tiempo que estoy concentrado en nuestra misión, eso es prácticamente toda mi vida", contó en una entrevista con CNN en 2015.Una de las claves de su rutina es la priorización. Zuckerberg no se involucra en todos los detalles, pero sí en aquellos que pueden cambiar el rumbo de Meta. Esto incluye decisiones sobre inteligencia artificial, realidad virtual y el desarrollo del metaverso. Su enfoque está en los temas estratégicos, dejando la ejecución a sus equipos.El equilibrio entre trabajo y familiaA pesar de su agenda exigente, Zuckerberg reserva las noches para su familia. Cena con su esposa, Priscilla Chan, y sus hijos, en un ambiente libre de dispositivos electrónicos. Este momento es sagrado para él, y lo utiliza para reconectar con su entorno más cercano. Esta práctica no solo fortalece los lazos familiares, sino que también le permite desconectarse del ritmo acelerado del mundo tecnológico."A veces leen libros juntos, a veces programan juntos", dijo Priscilla Chan durante una entrevista con Forbes sobre la rutina de Mark Zuckerberg a la hora de dormir con sus hijos. "Mark ha estado haciendo eso con August desde que cumplió 3 años". De la misma manera, Zuckerberg también habló de su rutina de "buenas noches" con sus hijas durante una entrevista del podcast de Lex Fridman en 2023. "¿Qué es lo más importante en la vida?", se preguntó, y luego mencionó que para él son fundamentales la salud, los amigos, la familia y tener algo por lo que anhelar.Dormir temprano, rendir mejor“No me quedo despierto hasta muy tarde”, enfatizó en la entrevista con Forbes. Esta afirmación resume su filosofía de vida: descansar bien para rendir mejor. A diferencia de otros líderes tecnológicos que promueven jornadas maratónicas, Zuckerberg prioriza el sueño como una herramienta de productividad. Esta visión lo aleja del estereotipo del CEO que sacrifica todo por el trabajo.Una rutina que refleja una nueva etapaLa rutina diaria de Mark Zuckerberg no es la de un joven programador obsesionado con el código, sino la de un líder maduro que busca equilibrio. Su interés por las artes marciales, su enfoque en la familia y su manera de estructurar el trabajo reflejan una evolución personal y profesional. Ya no se trata solo de escalar una empresa, sino de sostenerla con inteligencia emocional y física.Este cambio también se ve en su imagen pública. En los últimos años ha adoptado una postura más segura, incluso competitiva, participando en torneos de jiu-jitsu y mostrando una faceta más humana y menos corporativa. Esta transformación conecta con una nueva generación de líderes tecnológicos que entienden que el éxito no solo se mide en cifras, sino en calidad de vida.¿Qué podemos aprender de su rutina?La rutina diaria de Mark Zuckerberg ofrece lecciones aplicables más allá del mundo empresarial:Minimizar decisiones triviales: como su vestimenta o desayuno, para liberar energía mental.Incluir actividad física regular: no solo por salud, sino como herramienta de enfoque.Reservar tiempo para la familia: incluso en agendas exigentes, el equilibrio es posible.Dormir bien: como base para una productividad sostenible.DANNA SOFÍA SUÁREZ GPERIODISTA DE NOTICIAS CARACOLDSSUAREZ@CARACOLTV.COM.CO
Una ida a comprar el pan para el desayuno fue el último rastro de Jessica Medina en la localidad de Bosa, sur de Bogotá. Las autoridades tienen en su poder un video de cámaras de seguridad que es clave para encontrar a la menor de edad de 17 años, quien está siendo buscada incansablemente por su familia.Jessica salió de su casa del bario La Independencia para comprar el pan en la tarde del 16 de mayo de 2025. Su mamá, Diana Medina, ha buscado en todo el sector y ha preguntado en los locales comerciales aledaños por información que permita dar con el paradero de su hija.Lo único que ha encontrado esta madre desesperada es un video en donde se ve a su hija subiéndose a una motocicleta y yéndose con un hombre que para ella (la mamá de la joven) es desconocido. La familia de la menor no sabe nada sobre este hombre.En la grabación se ve a un hombre de sudadera (chaqueta roja y pantalón blanco) entregándole a la menor de edad un casco. La joven se lo puso, se subió al vehículo y ambos partieron con rumbo desconocido. La mamá de Jessica aseguró que su hija se veía asustada cuando abordó la motocicleta.“Yo fui donde la Policía, la Policía vino y me ayudó con el caso. Me dejaron ver la cámara y mi hija se ve asustada cuando se está subiendo a la moto”, manifestó Diana Medina en *City Noticias*.Agregó que ya ha preguntado a parientes cercanos y amigos de la menor de edad por información que permita dar con su paradero: “No, ya hemos llamado a los amigos y nada. Mis hermanos también me han ayudado a buscarla. Estamos muy preocupados. Yo no he podido dormir”.La familia de Jessica aseguró que ella suele estar en contacto y que no tenía ningún motivo para ausentarse, pues en su casa no tenía problemas con nadie. La mamá de la adolescente indicó cómo iba vestida su hija el día que desapareció misteriosamente: “Tenía una sudadera blanca, llevaba el cabello suelto y una chaqueta blanca de poncho”.Diana Medina sostuvo que su hija no contaba con redes sociales, por lo que contactarla por esos medios no es posible. Además, el celular que ella tenía se averió en los últimos días, así que no hay manera de poderla llamar. “Ella solo tenía TikTok, ella no tenía Facebook”, indicó la madre de la menor desaparecida.¿Cómo reportar a una persona desaparecida?Reportar a una persona desaparecida es un procedimiento crucial que debe realizarse lo antes posible. En Colombia, los ciudadanos pueden acudir a la Policía Nacional o la Fiscalía General de la Nación para presentar una denuncia sin necesidad de esperar un tiempo específico. Es recomendable proporcionar información detallada como nombre completo, características físicas, última ubicación conocida y cualquier dato relevante que pueda ayudar en la búsqueda. También es útil compartir fotografías recientes de la persona y sus posibles lugares de tránsito.Si un menor de edad se extravía, la reacción rápida es fundamental. Lo primero es verificar los lugares cercanos donde pudo haberse desplazado, como parques, tiendas o casas de amigos. Si la búsqueda inicial no da resultados, se debe contactar inmediatamente a la Policía llamando al 123 y proporcionar la mayor cantidad de información posible. Es aconsejable alertar a otras personas en el área y solicitar ayuda a través de redes sociales o medios comunitarios.Además, en Colombia existe el programa Alerta Amber, que se activa en casos de desaparición de menores y ayuda a difundir la información en medios de comunicación y redes oficiales. Es importante mantener la calma y colaborar con las autoridades, ya que cada minuto cuenta en estos casos.Tomar medidas preventivas, como enseñar a los menores datos de contacto familiares y lugares seguros, también es esencial para reducir los riesgos de extravío. La rápida acción y la coordinación comunitaria pueden marcar la diferencia.(Lea también: José de la Cruz, el joven que desapareció cerca donde fue vista por última vez Tatiana Hernández)CAMILO ROJAS,PERIODISTA NOTICIAS CARACOLX: RojasCamoCorreo: wcrojasb@caracoltv.com.coInstagram: Milografias
El colombiano Yaser Asprilla llegó al Girona como una de las apuestas más ambiciosas del club catalán para la presente temporada. Su fichaje fue presentado como una incorporación estelar, en medio del proyecto del equipo para consolidarse en la élite del fútbol europeo, especialmente tras haber clasificado a la fase de grupos de la UEFA Champions League, una hazaña histórica para la institución.Sin embargo, la temporada no ha sido la esperada ni para el club ni para el joven futbolista. El Girona, que venía de ser uno de los protagonistas en LaLiga en el curso anterior, sufrió una caída en su rendimiento colectivo, y durante varias jornadas coqueteó peligrosamente con los puestos de descenso. Esta situación contrastó con el entusiasmo generado al inicio del curso, cuando se esperaba que el club pudiera mantenerse competitivo tanto a nivel nacional como internacional.En España aguardan por la mejor versión de Yaser AsprillaAsprilla, por su parte, ha tenido una campaña de adaptación. El Girona desembolsó cerca de 18 millones de euros al Watford por el ‘cafetero’, asegurando su vinculación con un contrato hasta junio de 2030. A sus 21 años, el mediapunta colombiano llegó con un cartel de promesa por su talento, regate y visión de juego, además de lucir el dorsal número 10, una responsabilidad que no pasó desapercibida.El diario catalán 'Sport' analizó su desempeño y, aunque reconoció que no cumplió con todas las expectativas, también subrayó que hay razones para ilusionarse con su crecimiento. “No ha sido una buena temporada para Yaser Asprilla. Tampoco para el Girona en general. (…) Las sensaciones que ha dejado esta temporada son que puede ser un futbolista importantísimo de cara a la próxima campaña, pero que tiene que cambiar algunas cosas en su juego para ser determinante jornada tras jornada”, destacó el medio.Números de Yaser Asprilla en GironaDurante la temporada, Asprilla ha disputado 32 partidos en todas las competiciones, con un balance de tres goles, una asistencia y un total de 1.554 minutos en cancha. Aunque sus números no son deslumbrantes, muestran un aporte constante y una base sobre la cual crecer.¿Cuándo vuelve a jugar Girona?El Girona cerrará su participación en LaLiga este 25 de mayo, cuando reciba en Montilivi al Atlético de Madrid. El partido está programado para las 7:00 a. m. (hora colombiana).
Rigoberto Urán, uno de los corredores más carismáticos de la última época en el pelotón internacional gracias a sus ocurrencias, no deja de ser noticia y de hacerse notar como protagonista de primera plana pese a que ya está retirado de la actividad profesional.Fue así como el Giro de Italia tuvo homenaje especial para él en la etapa 12, celebrada el jueves 22 de mayo de 2025 sobre 172 kilómetros entre las localidades de Modena y Viadana, fracción sin mayores dificultades montañosas en la que el lote avanzó sin alteraciones.La ronda itálica aprovechó que la jornada era tranquila, casi de transición, para hacer referencia al antioqueño de 38 años de edad, que brilló en esa competencia en las temporadas 2013 y 2014, cuando respectivamente fue subcampeón detrás del italiano Vincenzo Nibali y del también colombiano Nairo Quintana, que actualmente hace parte del Giro como uno de los referentes de la escuadra española Movistar Team.Rigoberto Urán se robó el ‘show’ en Giro de Italia 2025El paisa fue recordado por las redes sociales oficiales de la competencia gracias a un hecho histórico conseguido por el ‘escarabajo’ en 2014, cuando fue el primer ciclista latinoamericano que consiguió ser líder de la clasificación general luego de imponerse en una etapa contrarreloj.En ese sentido, el equipo Quick-Step, de Bélgica, con el que alcanzó esa conquista, lo felicitó con una fotografía del momento y el siguiente mensaje:“Rigoberto Urán hizo historia hace 11 años al convertirse en el primer colombiano en vestir la #GirodItalia ‘maglia’ rosa”.A su vez, las redes del Giro exaltaron el hecho con una particular felicitación: “Grande, ‘Rigo’”, palabras acompañadas de una bandera de Colombia y unas manos haciendo la forma de un corazón.Ahora, Urán se dedica a sus negocios personales y a organizar carreras para aficionados denominadas ‘Giro de Rigo’, eventos que lleva a diferentes ciudades de la región latinoamericana. Además, se metió al mundo del fútbol como uno de los nuevos accionistas del club de primera división Fortaleza, al que entró junto al cantante de vallenatos Carlos Vives.