La alborada para los amantes de los animales es la peor noche que tiene Medellín.
La detonación irresponsable de pólvora ha generado que perros se arrojen de los balcones, que gatos queden que los nervios alterados, que aves en el zoológico mueran al chocar contra las jaulas e incluso se conoce el caso, en el 2014, del aborto de una llama.
(Lea también: Aprenda a cuidar a su mascota de la quema indiscriminada de pólvora
)
La proliferación de la venta de pólvora, incluso, ha propiciado que en los barrios periféricos de Medellín se realicen actos de crueldad animal.
“Conocemos casos en los que incluso personas le han metido papeletas dentro de la boca a perros, o se las amarran de las patas para verlos correr de pánico”, manifiesta Marcela Díaz Duque, directora de la corporación Orca.
Por su parte, en el zoológico de Medellín se preparan para tratar a cerca de 400 animales con el fin de que no los afecte las detonaciones.
Julio Miguel Oyola, médico veterinario del Zoológico Santa Fe, afirma que las aves son las más afectadas por el estruendo, por lo que deben ser tratadas con medicina preventiva por lo menos durante diez días.
(Vea también: Autoridades y animalistas de Medellín, en alerta por la tradicional alborada
)
Los niños también están en inminente peligro. En diciembre del 2015 se registraron 53 menores quemados con pólvora durante diciembre y la mayoría de ellos perdieron algunos de sus dedos.
Al respecto, Gustavo Villegas, secretario de Seguridad de Medellín, manifestó que “El llamado es a que no se utilice la pólvora. Por dos razones. Una porque es un mal ejemplo para nuestros menores. Y porque debemos tener mucho cuidado con los animalitos, los perros, los gatos, que son los que más se ven afectados. Queremos crear una conciencia en ese sentido”.
Vender o usar pólvora no es un delito sino una contravención que acarrea multas que van hasta los veinte salarios mínimos mensuales.
Fernando Quijano, director de La Corporación para la Paz y el Desarrollo Social, Corpades, aclara que la alborada no es una tradición navideña, sino un ritual que comenzó en el 2003 por parte de bandas de la ciudad, con el fin de conmemorar la desmovilización del bloque Cacique Nutibara al mando de alias ‘Don Berna’.
En el 2015 la alborada dejó 21 personas quedadas con pólvora y dos heridas por balas perdidas.
Vea también:
Updated: noviembre 16, 2016 05:52 a. m.