Es hermano de ‘Sebastián’, capo que junto a ‘Valenciano’ desató una guerra por rentas ilícitas que dejó unos 5.000 muertos en Medellín y el área metropolitana.
Franklin Andrés Vargas Cardona fue capturado por la Dijín el 17 de febrero de 2012 en un centro comercial del sur de Medellín. Ese día, a pesar de presentarse con una cédula falsa, lograron identificarlo y enviarlo a prisión.
Era buscado por ser uno de los cabecillas de La Oficina. Su prontuario dice que siendo muy joven (tiene 44 años) hizo parte de Los Pepes (perseguidos por Pablo Escobar), trabajó junto a su hermano John Ericson (‘Sebastián’)
para el jefe paramilitar Diego Fernando Murillo Bejarano
, alias ‘don Berna’.
Pero una vez extraditado este a Estados Unidos, ‘Sebastián’ y ‘Valenciano’
, los dos consentidos de ‘don Berna’ se enfrascaron en una guerra por el poder y las rentas ilícitas que dejaba su jefe, que tenía bajo el control a las bandas delincuenciales de Medellín y los nueve municipios del área metropolitana.
La caída del ‘Flaco’
Tras ser detenido Franklin, las autoridades ordenaron la inspección al carro en el que se movilizaba y a dos de sus apartamentos, en el sector de La Aguacatala, en Medellín y en el municipio vecino, Envigado.
En las propiedades hallaron tres fusiles, una pistola, municiones de distintos calibres, 486 millones de pesos, 5.000 dólares, 4.000 euros y algo más llamativo aún: botellas con bebedizos de la ayahuasca o yagé.
Posteriormente, en marzo, durante la inspección a su automóvil encontraron una moderna caleta ubicada en el tablero del vehículo, la cual se abría con su voz y donde ocultaba un fusil AK-47, tres pistolas, un revólver, proveedores y municiones.
Con esas evidencias, a Frank no le quedó otra mejor opción que buscar un preacuerdo con la Fiscalía, el cual fue avalado por el Juzgado Tercero Penal del Circuito Especializado de Medellín, quien lo sentenció en noviembre de 2012 a pagar 16 años y cuatro meses de cárcel por concierto para delinquir, porte ilegal de armas de fuego y falsedad en documento.
Ahora, luego de pagar su condena, salió de la cárcel de Palogordo en Girón (Santander), a donde fue enviado después de que las autoridades en Medellín señalaran que en el penal de Pedregal, en esa ciudad, seguía delinquiendo.
Según documentos conocidos por Noticias Caracol, el antiguo cabecilla de La Oficina fue notificado el 13 de diciembre que se le aprobaba la redención de 113 días por haber estudiado en el centro penitenciario y que se le concedía la libertad condicional “previa suscripción de diligencia de compromiso y prestación de caución equivalente a 1 smlmv-susceptible de póliza judicial”.
Autoridades de Palogordo confirmaron a este medio que cuatro días después, ‘el Flaco’ abandonó el penal, lo que para habitantes del sector de Las Palmas en Medellín explica la ostentosa quema de pólvora que se dio el viernes 20 de diciembre.
Durante su estadía en la cárcel, Frank logró redimir 788 días de condena, lo que agilizó su salida a las calles en las que anteriormente tuvo un amplio poder.