Tres resguardos indígenas le dijeron sí a hidroeléctrica en el Chocó

Es un ambicioso proyecto de energía limpia, que se espera genere más de mil empleos y representará inversiones cercanas a $1,5 billones.

Tres resguardos indígenas, los más impactados para el desarrollo del proyecto Talasa, le dijeron sí a la hidroeléctrica. Son más de mil 500 miembros de estas comunidades los que se han vinculado al programa.

“Las propuestas que se han hecho se han cumplido, antes que viniera este proyecto Talasa no había ningún empleo, creo que con este proyecto va a estar mejor”, señala Jorge Tanogama, de la comunidad indígena Sabaletas.

“Nosotros tuvimos que valorar y analizar si el proyecto era sostenible ambiental y socialmente. Como desarrollo del pueblo indígena, somos conscientes que esto va a generar mucho empleo”, añade José Luis Queragama, líder indígena del resguardo 12 Borbollón.

Pero así como hay voces a favor, hay otras en contra; los campesinos aseguran no se les tuvo en cuenta.

“Sin una socialización con las comunidades campesinas porque no las han hecho, frente a la minería de subsistencia que le llaman barequeros se van a ver afectados también”, dice John Jairo Tirado, líder del Carmen de Atrato.

El  proyecto permitirá generar cuatro veces más la energía de la que hoy consumen los chocoanos.

La mayor preocupación en la zona es la presencia de minas ilegales muy cerca del proyecto de la hidroeléctrica.

“Porque entre otras cosas se está utilizando dinamita y se está utilizando mercurio que vierten al río Atrato, detrás de toda minería ilegal vienen grupos al margen de la ley”, dice el alcalde del Carmen del Atrato.

La central hidroeléctrica de Talasa, declarada como proyecto de interés nacional y estratégico, le representará al Chocó inversiones cercanas a los 1,5 billones de pesos.