Miles de opositores del presidente Maduro se concentraban este sábado en una de las principales arterias de Caracas, en una clara "demostración de fuerza".
"Hay que mantenerse en las calles 50 o 1.000 días más, lo que haga falta hasta que Maduro acepte hacer elecciones o se vaya", señalo Antonio Moreno, un estudiante de 21 años, enfundado con un casco de obrero y un improvisado escudo de madera con la palabra "resiste", para protegerse de eventuales bombas lacrimógenas.
Ya son unos 3.000 opositores congregados, bajo enormes pancartas que piden: "#No más dictadura!", "Elecciones Ya", en medio de barricadas armadas con troncos y piedras y un gigantesco tanque de metal, para protegerse de la policía.
Los adversarios de Maduro quieren que esta nueva marcha en la principal autopista de Caracas supere la del 19 de abril, que con cientos de miles de personas fue la más multitudinaria de esta oleada que en siete semanas también ha dejado cientos de heridos y unos 2.200 detenidos.
En otra parte de la ciudad, Maduro recibirá en el Palacio presidencial de Miraflores a un grupo de trabajadores vestidos de rojo, que también y a la misma hora, cantando y bailando, se aglomeraban en el centro de Caracas en respaldo a la Asamblea Constituyente "popular", convocada recientemente por el mandatario.
El país está completamente dividido y casi paralizado, en medio de un colapso económico que genera una severa escasez de alimentos y medicinas, y una inflación que según el FMI escalará a 720% este año. Un cóctel que se complementa con altos índices de criminalidad.
Los opositores denuncian una "salvaje represión" del gobierno, que a su vez los acusa de apelar al "terrorismo" para asestarle un golpe de Estado financiado por Estados Unidos.
Updated: mayo 20, 2017 01:10 p. m.