La decisión se tomó luego de que algunas entidades de Antioquia, entre ellas la Personería de Medellín, solicitaran al Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres que pidiera al Inpec la evacuación. El patio 5 estaba diseñado para albergar 300 presos y, en la actualidad, hay 1.424. La Personería solicitó también evaluar la posibilidad de demolerlo totalmente y analizar la estructura de todo el centro de reclusión.
Varios de los heridos fueron trasladados a centros asistenciales de Medellín, entre ellos los tres guardianes del patio B. La situación fue controlada por las autoridades.
El delincuente se dio a la fuga en un descuido de los guardias, durante el fallido traslado de los detenidos a un centro carcelario del Valle de Aburrá. Cuando los guardias llegaron de regreso a los calabozos del Palacio de Justicia se percataron de que uno de los presos no estaba. De inmediato iniciaron los operativos para recapturarlo.