La investigación que aborda la crisis de movilidad que viven las principales ciudades del país, evidencia lo que nos valen los trancones a los colombianos y especialmente a la ciudad capital.
Pero no solo son los buses de transporte público, el Transmilenio que nació como alternativa de sistema de transporte integrado ha sido ineficiente e insuficiente, no mejora la situación y cada vez menos personas desean utilizarlo.
Viajes a pie o en bicicleta se plantean como los medios que el Gobierno desea promover, pero los usuarios esperan que sea de calidad, una iniciativa que requiere no solo de recursos sino de condiciones y conciencia social.
La cantidad de horas perdidas en productividad cuestan 16 billones de pesos, cifra similar a lo que cuesta la primera línea del Metro para Bogotá, cercano también a todo el presupuesto de la capital en un año.
Además, los carros nuevos que se venden en Colombia en tres años suman un millón. Poner todos esos vehículos en fila, formaría una línea recta entre Bogotá y Buenos Aires, ciudades entre las que hay 4.600 kilómetros de distancia.
Updated: enero 19, 2015 02:20 p. m.