La dura sentencia fue emitida por un juez especializado de Bogotá, contra ocho personas, entre hijos, hermanos y sobrinos de los capos.
Los condenados son familiares a quienes en el año 1990 los Rodríguez Orejuela les cedieron las acciones de Drogas La Rebaja. De acuerdo con autoridades, la fachada para blanquear los dineros fue la cooperativa de ahorro y crédito Caja Solidaria, que entre 1997 y 1998 tuvo movimientos millonarios.
Una fortuna manejada por testaferros, hasta que la Fiscalía encontró que se incrementó injustificadamente de $34 mil millones a $132 mil millones.
Los manejos financieros dejaban ver que la empresa, a pesar de que los exjefes del cartel de Cali estaban negociando con la justicia, se encontraba bajo su poder.
Además, para el togado es inadmisible que los hoy sentenciados dijeran que desconocían el ingreso de dineros del narcotráfico a esas empresas, mucho menos después de ser incluidas en la Lista Clinton.
"Ni para el más desprevenido o desinformado de los ciudadanos era oculta la significancia y repercusiones de ello, como tampoco era desconocido cual era el origen y razón de la inclusión en tan infausta lista", indicó el fallo.
Entre los ocho condenados a nueve años está Jaime, hijo de Gilberto Rodríguez Orejuela. De esta sentencia no hacen parte Alexandra y Humberto Rodríguez Mondragón, quienes hace tres años aceptaron haber escondido los bienes del cartel de Cali.
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