Se estima que existen unos 170 millones de piezas producto de misiones siderales con alta probabilidad de chocar satélites y causar serios daños.
Esta llamada "chatarra espacial", dejada luego de misiones espaciales y que pueden llegar a ser tan grandes como todo un piso de un cohete espacial, orbitan junto a unos 700.000 millones de dólares en infraestructura espacial.
Pero solo se sigue el rastro de 22.000 trozos, fragmentos que podrían desplazarse a velocidades superiores a los 27.000 km/h. Las más pequeñas piezas podrían provocar serios daños, o destruir, satélites.
"Cada año el problema de la basura espacial es peor", dijo Ben Greene, al frente del Centro de investigación espacial de Australia que organiza la conferencia de dos días en Canberra.
"Perdemos tres a cuatro satélites por año por colisiones con los restos espaciales. Estamos muy cerca, según estimaciones de la NASA, de perder todo dentro de cinco a diez años", agregó.
En un comunicado, Greene sostiene que "es ahora posible una catastrófica avalancha de colisiones, que rápidamente destruya todos los satélites en órbita", subrayando además que más choques crean más chatarra.
Más residuos espaciales amenazan la economía dada la dependencia cada vez mayor de los satélites de comunicación o geoposicionamiento, utilizados por industrias clave como el transporte, las finanzas o la energía.
"La economía australiana es totalmente dependiente del espacio", dijo Greene.
Avances tecnológicos hicieron además posible que empresas privadas se lanzaran a la conquista espacial, enviando sus propios objetos, destacó el experto Moriba Jah, de la Universidad de Texas, que participa en la conferencia.
"Creo que estamos en la senda de lo que llamo una tragedia de los comunes", dijo a la Australian Broadcasting Corporation, agregando que una colisión mayor es "inevitable" sin una acción para evitar el problema.
"Es como cuando se conduce en una carretera cubierta de niebla y se tiene que ir muy despacio, sin saber qué es lo que hay realmente alrededor de uno. Esa es la perfecta analogía del espacio actual", señaló Jah.
Greene dijo que los científicos desarrollan tecnologías que estarían operativas en 18 meses para rastrear todos los restos, para que las naves espaciales puedan evitarlos.
Otra idea que está siendo desarrollada es el uso desde la Tierra de potentes láseres para "empujar un poco más lejos" los restos, un programa que fue desarrollado en un 75%, añadió.
Una misión experimental japonesa destinada a limpiar la basura utilizando una "cuerda" electrodinámica para desplazar la chatarra a una órbita más cercana a la Tierra fracasó en febrero.
Updated: mayo 31, 2017 06:15 p. m.