El nuevo mandatario sorprende por su corta edad para ejercer y también por la de su compañera, una de sus exprofesoras que le robó el corazón.
Se enamoraron en un salón de clase, lo cual no tendría nada de raro, de no ser porque ella era la profesora, una mujer de 39 años, casada y madre de tres hijos, y él era su estudiante, un brillante joven de 16 años.
Brigitte Trogneux enseñaba francés y teatro a Emmanuel Macron en una escuela jesuita en la provincia Amiens. Era un amor imposible, pero no por mucho tiempo.
El creció y ella se divorció. Fue así como se reencontraron años más tarde y en el 2007 se casaron.
Brigitte, hoy con 64 años, abuela de siete nietos, se ha dedicado a manejar la agenda privada de su marido y a corregir sus discursos.
Él dice que en cuestión de semanas definirán cómo será su rol como primera dama.
Por cierto, los Macron y los Trump se llevan lo mismo 24 años de diferencia, pero cuando se trata de una mujer mayor y de un romance de colegio, la historia es mucho más llamativa.