Hombre que no tenía dónde vivir fue acogido por buen samaritano, pero le pagó con la muerte

Un hombre que no tenía dónde vivir mató a la persona que decidió brindarle un hogar en Arica, Chile. Aunque intentó eludir a las autoridades, fue capturado y condenado. La sentencia se conocerá antes de terminar 2021.

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El agresor fue identificado como Guillermo Alejandro Espinoza Araya, de 51 años, y su víctima tenía 65.

El hombre que no tenía dónde vivir se reunió con unos amigos en la casa de su benefactor el día del homicidio, el 17 de octubre de 2020.

Poco después de quedarse solo en la vivienda, se dirigió al cuarto de su víctima con un cuchillo y un martillo. Primero la apuñaló y luego empezó a golpearla en la cabeza, causándole la muerte.

Tras el asesinato, el hombre que no tenía dónde vivir huyó y arrojó la ropa que usaba a un basurero y esta fue recogida por un camión recolector.

Tres días después las autoridades llegaron al inmueble por las denuncias de los vecinos por el olor que salía del lugar. Allí encontraron el cadáver.

El señalado homicida fue capturado y ahora aguarda la sentencia por el asesinato de quien le tendió una mano.

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