El secretario de Estado de EE. UU., John Kerry, pidió este miércoles al Gobierno de Nicolás Maduro cumplir con los compromisos que asumió en el diálogo con la oposición venezolana y restaurar los derechos de los políticos que estaban tratando de expresar su disenso.
En su primera visita a México, Kerry aseguró que "el Gobierno tiene que ejercer el poder de manera responsable y tomar decisiones para generar estabilidad y encontrar un camino hacia el futuro en Venezuela (...). Esto podrá lograrse si se cumplen los acuerdos".
Destacó que EE. UU. tenía una "gran expectativa" en el diálogo entre las partes en Venezuela bajo la mediación del Vaticano y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
"Desafortunadamente, el Gobierno venezolano ha fracasado totalmente en demostrar acciones de buena fe para implementar aquellas cosas que acordaron" un mes atrás, afirmó en una rueda de prensa con su colega mexicano, José Antonio Meade.
"Tenemos una gran inquietud por la inestabilidad que se está dando como resultado de lo que está ocurriendo en Venezuela", sumida desde febrero pasado en una ola de protestas antigubernamentales en las que han muerto más de 42 personas.
Las conversaciones, iniciadas en marzo, fueron paralizadas por la Mesa de Unidad Democrática (MUD), que reúne a los principales grupos de oposición y pide al Ejecutivo un "gesto" que demuestre su disposición de pasar de las promesas a los hechos.
Kerry aseguró que EE. UU. ha tratado de motivar a otros actores para que faciliten una solución política al conflicto, ya que Washington está interesado en que "Venezuela sea pacífico, democrático y estable".
El Congreso estadounidense está hablando sobre sanciones y ya han aprobado un proyecto de ley que refleja ese interés, pero "nosotros esperamos que los líderes, el presidente Maduro y otros, tomen las decisiones que hagan que las sanciones sean innecesarias", apuntó.
El Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el día 9 pasado una iniciativa bipartidista para imponer sanciones contra algunos funcionarios venezolanos, en un primer paso del proceso legislativo que debe ser ratificado por el Senado.
"Todas las opciones siguen en juego en este momento, pero esperamos que podamos avanzar hacia el futuro de una manera tranquila", aseveró hoy el secretario de Estado.
Venezuela y EE. UU. están en uno de sus momentos de relaciones más bajos, sin embajadores y con continuos conflictos que se han traducido en la expulsión por parte de Caracas de ocho diplomáticos estadounidenses acusados de supuesta injerencia, una medida que ha sido respondida por Estados Unidos de manera similar.
Updated: mayo 21, 2014 04:10 p. m.