Un caso de aparente negligencia médica se presentó en la localidad de Caerphilly, en Gales, Reino Unido, donde una mujer que presentaba síntomas alarmantes en garganta y dificultades para tragar fue remitida de carácter urgente a un hospital, pero perdió la vida poco después tras ser diagnosticada con cáncer
cuando ya no se podía intervenir quirúrgicamente.
La paciente, identificada como Maria Shafighian, de 59 años, comenzó con una parálisis de cuerdas vocales tras sufrir de “ronquera persistente”, pero su estado empeoró cuando comenzó a tener dificultades para tragar. Luego de solicitar una valoración urgente, el médico de cabecera de la mujer la refirió al departamento de otorrinolaringología, donde se le ordenó una tomografía computarizada.
Inicialmente, en el sistema no se le encontraron signos de cáncer de garganta, pero sus síntomas fueron empeorando cada vez más hasta que fue trasladada al departamento de terapeutas del habla y el lenguaje.
Sin embargo, su remisión, que fue solicitada a través de una carta, fue olvidada en el fondo del correo durante más de un mes. Esta situación hizo que la paciente no pudiera acceder de manera oportuna al encuentro con los especialistas, lo cual era crucial para su diagnóstico y posterior tratamiento.
Luego de ser atendida por los terapeutas, la mujer recibió el diagnóstico de cáncer de esófago, un cáncer de garganta que suele ser más común en hombres de edad avanzada. A partir de ese momento, la mujer vivió durante 6 meses más, pero perdió la batalla contra su enfermedad, que había avanzado rápidamente.
Acorde con los especialistas, sus posibilidades de supervivencia se vieron afectadas por un simple pero determinante error de papeleo, ya que cuando finalmente recibió el diagnóstico de cáncer era demasiado tarde y no pudo ser considerada como candidata para la intervención quirúrgica. En cambio, recibió quimioterapia paliativa y radioterapia.
Caroline Saunders, la médica forense encargada de la investigación, ordenó realizar un informe de prevención de muertes futuras a la junta de salud, para evitar que situaciones como estas vuelvan a presentarse.
Según el informe oficial de la autopsia, se descubrió que la mujer falleció por causas naturales después de que “se perdieron oportunidades para identificar y tratar su tumor antes”.
A raíz de caso, la directora ejecutiva de la Junta de Salud de Aneurin Bevan, Nicola Prygodzicz, aseguró que la línea de remisión se modernizó, y desde ahora se desarrolló un formulario de referencia electrónico interno para evitar que se pierda entre otros documentos.
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