El progenitor también intentó destruir la máquina de diálisis, que falló en medio del tratamiento de su hijo.
“El papá al informarle que había fallecido su hijo entró en crisis de ira y arremetió contra el personal de forma verbal y contra los equipos. Rompió una de las puertas de seguridad”, contó Huniades Urbina, jefe de pediatría del hospital.
La guardia Nacional tuvo que intervenir para detener al airado hombre.
La familia denuncia que en el centro clínico no había los insumos para tratar a su hijo. Además, cuestionaron la actuación del Ministerio de Salud de Venezuela, ya que no investigó la presencia del peligroso virus en la institución que atendió al menor fallecido.
“Nosotros pensamos que la ministra iba a estar aquí para investigar ya que el virus no es común. Presumíamos que junto a infectología verían si tocaba cerrar el hospital para que no hubiera más contagiados”, declaró Johnathan Loyo, abuelo del paciente fallecido.
Médicos del centro hospitalario denunciaron que hay otros dos pequeños hospitalizados con la misma sintomatología, pero no hay los reactivos para hacerles las respectivas pruebas.
Este es tan solo un ejemplo de la compleja crisis de la salud que vive el país vecino. Las continuas protestas de enfermos crónicos por la falta de atención y medicamentos son desatendidas por el gobierno de Nicolás Maduro.
Updated: abril 26, 2018 04:28 p. m.