Miles de estudiantes marcharon en Santiago para presentar un documento en el que exigen al gobierno de Michelle Bachelet definir una estrategia para la educación universitaria, un nuevo diseño de distribución de la financiación estatal y eliminar la Prueba de Selección Universitaria (PSU), entre otros.
"La propuesta tiene que ver con la democracia interna dentro de las instituciones educativas, la gratuidad universal, el fin al lucro, y una carrera que dignifique la profesión docente", dijo a Efe la presidenta de la Federación de Estudiantes de Chile (Fech) y vocera de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), Valentina Saavedra.
La iniciativa, que surge desde Confech, propone además mayores recursos para todos los niveles educativos y así aumentar la matrícula de las instituciones públicas, y que las universidades que quieran ser del Estado tengan como requisito acogerse a la estrategia nacional de desarrollo y entregar estabilidad laboral a sus funcionarios.
En cuanto a la gratuidad, los estudiantes piden transferir el presupuesto destinado a becas por financiación a las instituciones, para así, disminuir los aranceles y poner fin al costo de las elevadas matrículas, y al eliminar la PSU exigen generar un nuevo sistema de ingreso universitario que privilegie la vocación.
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Según la Confech, al menos 200 mil estudiantes, profesores y organizaciones sociales se manifestaron este miércoles en Santiago, en una jornada que paralizó el centro de la capital chilena y que terminó con incidentes entre Carabineros y encapuchados y algunos detenidos.
La marcha se enmarca en una serie de manifestaciones que se han llevado a cabo en Chile a lo largo de esta semana, como la de 'cuerpos pintados', realizada el pasado lunes delante del Palacio de la Moneda, la sede del Gobierno.
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Además de la manifestación de los estudiantes de las universidades privadas, quienes marcharon durante la mañana del martes por la Alameda, la principal arteria de la capital.
Asimismo, la movilización, catalogada como la "marcha de las propuestas", se encuadra en la segunda semana de paro nacional convocado por el Colegio de Profesores que solicitan retirar el proyecto de Carrera Docente que se encuentra actualmente en el Congreso.
El gremio de maestros rechaza el requisito de rendir una prueba de conocimientos para certificarse en la carrera docente, al igual que el monto de las remuneraciones que, según el magisterio, siguen siendo muy bajas.
En tanto, el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, aseguró en declaraciones a Televisión Nacional que "está absolutamente claro que el proyecto no se retira porque esta es una necesidad para el país".
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En ese sentido, los estudiantes apoyan las demandas de los profesores y reclaman que exista mayor participación de todos los actores sociales para crear la reforma educacional.
"Paremos con esta lógica del secretismo, de los documentos confidenciales, de que nadie sabe cómo van a ser los proyectos hasta que ingresan a la Cámara de Diputados, y que efectivamente construyamos la educación entre todos", aseguró Saavedra.
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Los estudiantes iniciaron sus protestas en 2011 en contra del sistema educacional impuesto por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y pusieron como bandera de lucha el establecimiento de una educación pública, gratuita y de calidad, la que fue acogida como propuesta de gobierno de Bachelet, pero que aún no se define.
En manifestaciones previas, dos jóvenes murieron en la ciudad chilena de Valparaíso tras recibir disparos cuando se encontraban realizando una pintada en la pared de una casa, mientras otro estudiante resultó gravemente herido producto de un chorro de agua proveniente de un carro lanzaaguas de Carabineros.
Rodrigo Avilés, de 28 años, estudiante de la Universidad Católica se encuentra en proceso de recuperación, después de estar dos semanas en coma inducido.
Los médicos estiman que el muchacho podría quedar con daños neurológicos producto de una fractura craneal tras ser alcanzado por un chorro de agua.
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