La desaparición de Tatiana Hernández en Cartagena sigue generando acciones y llamados urgentes. Su familia anunció una nueva recompensa económica por información que permita dar con su paradero. Esta vez, el apoyo proviene de la Alcaldía de Cajicá, municipio de Cundinamarca donde residen sus padres.El nuevo aporte se suma a la recompensa ya vigente ofrecida por las autoridades cartageneras. La familia espera que este respaldo adicional motive a quienes puedan tener información clave que contribuya a la investigación.La familia de Tatiana había solicitado un apoyo de la administración municipal de Cajicá. Tras una evaluación, la Alcaldía confirmó que entregará $25 millones como parte de la recompensa. Este monto se suma a los $200 millones que ya estaban siendo ofrecidos por las autoridades en Cartagena, elevando la cifra total a $225 millones.La decisión representa un respaldo institucional importante y un mensaje claro: la búsqueda de Tatiana no se detiene.El día que desapareció Tatiana HernándezLa estudiante de Medicina, de 23 años, fue vista por última vez el domingo 13 de abril. Ese día, su madre le llevó el almuerzo al Hospital Naval de Bocagrande, donde la joven realizaba su internado como parte de su formación médica.“Salió corriendo, me recibió el paquete y fue de afán”, relató Lucy Díaz a la Nena Arrázola en Los Informantes. Más tarde, a las 8 de la noche, David Espitia, su novio en Bogotá, les contó a los padres de la médica que una compañera de la joven le confirmó que se encontraba extraviada y que habían encontrado sus sandalias y uno de sus celulares en los espolones, una zona cercana al mar. Desde entonces, no se ha sabido nada más.Objetos clave en manos de la FiscalíaLa Fiscalía General de la Nación tiene en su poder varios objetos personales de Tatiana: un computador, una tablet y dos celulares. Uno de los teléfonos fue hallado en la playa, el otro en su habitación. La existencia de dos dispositivos sorprendió a los investigadores, pero no a su madre.“¿Tiene conocimiento de que su hija utilizaba dos celulares?”, le preguntaron. “Sí, señor”, respondió Lucy Díaz. Uno de los equipos era un celular sin SIM card, que usaba como medida de seguridad tras haber sido víctima de un robo en Bogotá.Las compañeras de Tatiana colaboraron con la investigación entregando la clave de acceso al celular, lo que permitió a las autoridades revisar su contenido. Sin embargo, hasta el momento, no se ha revelado qué información contiene.La familia de Tatiana Hernández no se rindeDesde el día de la desaparición, Lucy Díaz ha encabezado marchas, repartido volantes y recorrido barrios enteros en Cartagena. “Tatiana está viva, está en un lugar oculto”, afirmó. “Tengo la esperanza y la ilusión que de pronto esté también ayudando a la gente en su estado de médico”.Tatiana estaba finalizando su carrera de Medicina y realizaba su internado en el área de ortopedia, una especialidad que la entusiasmaba bastante. Sus jornadas eran largas, pero encontraba momentos para caminar con sus colegas por el malecón, respirar la brisa marina y despejar la mente.Hasta ahora, ni la Policía ni la Fiscalía han emitido declaraciones oficiales sobre el avance de la investigación. La hipótesis más fuerte apunta a que Tatiana podría haber caído al mar, pero no hay pruebas definitivas y existen múltiples testimonios y pruebas documentales que podrían abrir nuevas líneas de investigación.El testimonio de David, su novioDavid Espitia, abogado de 26 años, tomó un vuelo a Cartagena al día siguiente de la desaparición. Desde entonces, ha acompañado a la familia en la búsqueda. “Tata es una persona que es muy responsable. Si ella salía, les avisaba a las amigas o a la señora Lucy. En su efecto también me decía a mí ‘voy a ir a tal lado’”, contó.Ese domingo, hablaron al mediodía. “Me dice, ‘amor, voy a estudiar y después voy a almorzar’”. Luego, no respondió más. “Ella se desconecta 2, 3 horas, yo decía como pues eso es lo que normalmente ella hace, pero ese día ya pasaban 4 o 5 horas y yo digo igual voy a escribirle a ver si almorzó al fin, si no, le escribo a ella y no me contesta”.Fue entonces cuando contactó a Sara, una compañera de Tatiana. “En una llamada que me hace Sara me dice ‘encontré las sandalias y encontré el celular, están aquí, están al lado del mar’ y me cuelga”.Lo que iba a ser una visita para ayudar a empacar las cosas de Tatiana al final de su internado, se convirtió en una pesadilla. Los padres de Tatiana y su novio han caminado por toda Cartagena, barrio por barrio, buscando pistas, preguntando, esperando.No hay rincón de la ciudad que no hayan visitado. Lo que comenzó como una búsqueda urgente se ha transformado en una rutina dolorosa, pero necesaria.Una recompensa como esperanzaLa nueva recompensa anunciada por la familia representa un nuevo impulso en la búsqueda. Con el respaldo de la Alcaldía de Cajicá, la cifra total asciende a $225 millones. Cualquier pista, por pequeña que parezca, puede ser la clave para resolver este caso que ha conmovido a todo el país.
Un hombre muy reconocido en Barranquilla, casado con una mujer menor que él, fue hallado muerto en extrañas circunstancias dentro de su propia casa. Se trataba de Eduardo Pinto, un destacado médico que en ese momento se desempeñaba como director de Medicina Legal. En un principio, las autoridades pensaron que el atroz crimen se trataba de un robo. Sin embargo, la investigación reveló un macabro hallazgo que cambió el rumbo del caso. El Rastro conoció el caso en 2017.“Era un buen hijo, hermano, amigo y un gran trabajador”, aseguró la madre de Eduardo Pinto, un hombre que, según su familia, era muy querido por la comunidad.Eduardo contrajo matrimonio con Dayana Jassir en 2008, y juntos tuvieron un hijo. Sin embargo, una tragedia marcaría para siempre a esta familia: el doloroso asesinato del director de Medicina Legal. Eduardo fue asesinado de tres disparos, justo cuando estaba a punto de cumplir ocho años de matrimonio con Jassir.No obstante, la relación no estuvo exenta de dificultades. A lo largo de los años, se vio marcada por altibajos, infidelidades mutuas y constantes tensiones familiares que fueron debilitando el vínculo entre ambos.El día del atroz crimenEl 4 de mayo de 2016, Rebecca, madre de Eduardo, recibió la trágica noticia del asesinato de su hijo. “Mi otro hijo me llamó y me dijo: ‘Levántate, que mataron a Eduardo’. Eran como las cuatro de la mañana. Yo no entendía nada, porque había hablado con él la noche anterior”, relató con dolor.Los familiares de Eduardo llegaron de inmediato a la Clínica Murillo, en Barranquilla, pero ya era demasiado tarde: él había fallecido.Según su esposa, Dayana Jassir, todo ocurrió durante un supuesto atraco en su vivienda, ubicada en el barrio Cevillar. La mujer declaró que había salido de la casa luego de que su conductor, Johan Beltrán, la recogiera para llevarla a su lugar de trabajo en Riohacha.Aproximadamente tres minutos después de salir de la vivienda, Dayana aseguró que fueron interceptados por un taxi del que descendieron dos hombres armados, quienes los amenazaron. Según el testimonio entregado a la Policía, ambos manifestaron que los delincuentes los obligaron a regresar a la casa, pues supuestamente querían robarla.En ese momento, uno de los asaltantes le disparó a Eduardo, causándole la muerte. Luego, los delincuentes huyeron del lugar llevándose algunas pertenencias de valor. Ambos abordaron el taxi donde los esperaba un tercer cómplice, con quien continuaron la fuga.La Fiscalía llegó al lugar de los hechos y recopiló evidencia fotográfica de la escena del crimen. Entre los elementos encontrados había un cuchillo, una almohada con tres impactos de bala y una cobija con rastros de sangre.Pistas claves de la investigaciónLas autoridades analizaron un total de 69 cámaras de seguridad en busca de pistas que permitieran identificar a los responsables del asesinato del director de Medicina Legal. En las grabaciones, se logró observar el momento exacto en que un taxi intercepta el vehículo en el que se desplazaba la esposa de la víctima.“Cuando el taxi intercepta al otro vehículo, en ningún momento se evidencia un acto de violencia ni se observa que uno de los vehículos bloquee al otro. Tampoco se ve ningún tipo de arma de fuego”, explicó el investigador, y agregó que “ellos manifestaron que habían sido ultrajados y amenazados con armas, pero eso no se logró observar”.La Policía logró identificar las placas del taxi, el cual estaba registrado a nombre de Miguel Ángel González. Durante la investigación, se descubrió que González tenía antecedentes criminales con Jesús Gutiérrez, alias ‘Chucho’ y Alberto Mario Cabrera, alias ‘Ñeco’. Todo apuntaba a que él, junto a los otros dos sujetos, eran los presuntos responsables del asesinato del director de Medicina Legal.Las autoridades interceptaron los celulares de los presuntos señalados, ahí hallaron llamadas telefónicas el día de los hechos con Johan Beltrán, conductor de Dayana Jassir.Macabro planEl 23 de junio de 2016, un mes después del atroz crimen, la Dijín capturó a Miguel Ángel González, Jesús Gutiérrez y Johan Beltrán. Durante las audiencias contra estos tres hombres, salió a la luz la suma de dinero que se habría pagado por el asesinato de Eduardo Pinto."Me enteré de que por el asesinato de Eduardo pagaron $2.900.000. Eso me dio muy duro. Era una porquería de plata", expresó Rebecca, madre de la víctima, conmovida por el atroz crimen.Antes de que se realizara la imputación de cargos, Johan Beltrán brindó unas declaraciones que cambiaron el rumbo de la investigación sobre este trágico asesinato. El sujeto vinculó a otra persona en el crimen. Además, en su testimonio, alias ‘Chucho’ también llamó la atención sobre la actitud sospechosa de la esposa del director de Medicina Legal.Johan no solo declaró que Dayana Jassir fue quien ordenó el asesinato de su esposo, sino que también afirmó que ella entregó el dinero para llevar a cabo el crimen. Además, la investigación reveló que entre Dayana y Johan existía una relación amorosa clandestina.“Ella de inocente no tiene nada. Ella fue la que planeó la muerte de Eduardo y lo entregó. Ella tiene que aprender que los hombres se respetan”, dijo Rebecca. Además, señaló que “tiene que pagar la muerte de Eduardo. Ella de ahí no va a salir. Ella tiene que pagar y yo espero que la condenen. Eduardo no merecía morir de la manera en que murió”.El 23 de noviembre de 2016, alias ‘Ñeco’, ‘Chucho’, Miguel González y Johan Beltrán fueron condenados por la justicia. Todos aceptaron los cargos y recibieron una pena de 19 años de prisión, con excepción de ‘Ñeco’, quien fue sentenciado a 17 años.Dayana Jassir permaneció detenida en la cárcel de mujeres de Barranquilla mientras esperaba su juicio. En noviembre de 2024, un juzgado penal del circuito de Barranquilla, en fallo de primera instancia, la absolvió. Sin embargo, la decisión fue apelada y posteriormente revocada por el tribunal superior, que la condenó a 57 años y 6 meses de prisión.La madre de la víctima nunca creyó en la inocencia de Dayana. Por el contrario, expresó con contundencia: “La odio, pero aun así no la quiero muerta. La quiero viva, sufriendo. Yo lloro a Eduardo todos los días, pero ella tiene que llorarlo más que yo”.
En un pequeño pueblo de Connecticut, Estados Unidos, la colombiana Nathalie Jacob y su esposo Simon Gilbert reconstruyeron su vida tras una experiencia que los cambió para siempre. Ella, una colombiana exitosa, políglota, con una maestría en Administración de Empresas y una carrera brillante en diferentes multinacionales, pasó de liderar equipos y manejar finanzas a no poder escribir su nombre ni reconocer los números. Todo comenzó con un accidente aparentemente inofensivo mientras esquiaba, pero terminó revelando un diagnóstico que cambiaría su vida para siempre: un tumor cerebral.“Iba bien rápido, sin casco, no me pasó nada, pero por si acaso cuando regresé a Miami me fui a revisar el dedo porque el dedo lo tenía morado”, relató Nathalie a Los Informantes en el 2023. Lo que parecía una simple revisión médica terminó en una noticia inesperada: “tienes un meningioma intraventricular, recomendamos que te lo quites lo más rápido posible porque está creciendo”, recordó.La cirugía fue programada con rapidez. El pronóstico era optimista: recuperación en tres semanas, bajo riesgo de complicaciones. Pero la realidad fue otra. “Entré esa cirugía y cuando me desperté no podía leer, no podía escribir, no podía sumar dos más dos, no podía parar de reírme porque yo estaba yo ahí sentada en la cama y no podía ni siquiera escribir mi nombre”, contó.En el cerebro de una niña de ocho añosLa operación, que debía ser un procedimiento sin mayores complicaciones, le dejó secuelas profundas. Nathalie despertó con una desconexión total de sus habilidades cognitivas. “Me dan un lápiz y me dicen que escriba mi nombre y yo dibujo un círculo”, recordó. Su percepción del mundo se alteró por completo: “me dicen ‘¿qué número tiene esa puerta?’ y yo ‘ocho’, entonces me llevan al siguiente cuarto y me dicen ‘¿y ese?’ y yo ‘ocho’”.Ese número, el ocho, se convirtió en símbolo de su nueva vida. “Por eso el título de mi libro es 8: redescubriendo la vida después de un tumor cerebral”, explicó. En numerología, el ocho representa nuevos comienzos, y para Nathalie, fue exactamente eso: un renacer.“El cerebro se convirtió en cerebro de una niña de dos años y fue espectacular porque era ver la vida como una niña de dos años, yo lo único que quería era que me dieran libros para colorear y durante horas yo coloreaba feliz”, relató.La vida después de la cirugíaSimon, su esposo, quedó en shock al verla salir del quirófano. Ella, una mujer que hablaba tres idiomas, tenía una maestría y había vivido en más de cinco países ahora no podía reconocer su entorno ni caminar sin tropezarse. “Recién llegaba a la casa me estrellaba con todas las paredes, no podía servir una taza de agua, me caía en un escaloncito”, recordó Nathalie.Además de perder habilidades cognitivas, perdió parte de su visión. “Los ojos están perfectos, es el cerebro que no reconoce que ve, entonces yo no veo nada con los dos ojos hacia la derecha”, explicó. Esta condición, conocida como hemianopsia, la dejó con una discapacidad invisible pero profundamente limitante.El síndrome raro y la lucha por reaprenderLo que Nathalie experimentó fue un síndrome neurológico extremadamente raro. “Es como un síndrome que pasó después de la cirugía y es algo extremadamente raro o exótico que pase”, afirmó. Este trastorno afectó su lenguaje, su capacidad para hacer cálculos simples y hasta su orientación espacial.Pero Nathalie no se rindió. Se obsesionó con reaprender, letra por letra, lo que su cerebro había olvidado. “Con mucho esfuerzo logré volver a escribir y a leer otra vez, pero después llega un tiempo donde uno tiene una curva de recuperación, pero llega a un techo que ya no recuperas más”, explicó. Aunque logró sumar, nunca pudo volver a multiplicar ni dividir.De la independencia a la dependenciaLa pérdida de sus habilidades cognitivas también significó un cambio radical en su vida profesional y personal. “Perder mi cerebro era perder esa independencia”, confesó. De ser la principal proveedora del hogar, pasó a depender económicamente de su esposo. Su rol en la familia cambió, y con ello, su identidad.Aunque físicamente parece recuperada, su cerebro se fatiga con facilidad. Tareas simples pueden convertirse en desafíos abrumadores. Aunque se le vea moverse de un lado al otro, su cerebro se fatiga con facilidad y algo muy sencillo se le convierte en una tormenta.La maternidad, un nuevo motor de su vidaEn medio de la adversidad, Nathalie encontró una nueva motivación: su hija. La maternidad, lejos de ser un obstáculo, se convirtió en un nuevo e inspirador propósito. Natalie convirtió su discapacidad en una oportunidad para tener más tiempo con su hija y también para ayudar a otros.Nathalie decidió compartir su historia, sin miedo a mostrar sus debilidades. Creó grupos de apoyo en Facebook que hoy reúnen a más de 10.000 personas. También da charlas y entrevistas, y escribió un libro para que su hija, algún día, entienda todo lo que vivió.“Haber pasado por una experiencia así es tremenda lección de humildad, entonces descubrí que lo que me gusta y lo que me hace feliz hoy en día es ayudar a las otras personas”, concluyó.La historia de Nathalie Jacob es recordatorio de que, incluso cuando la vida se vuelve un ocho, siempre hay una forma de volver a empezar.
La desaparición de Tatiana Hernández, estudiante de Medicina de 23 años, sigue siendo un misterio que conmueve a Cartagena y al país entero. Desde el 13 de abril, cuando fue vista por última vez saliendo del Hospital Naval en el barrio Bocagrande, su familia no ha dejado de buscarla. Ahora, más de un mes después, la Fiscalía ha entregado a sus familiares los dispositivos electrónicos que fueron sometidos a análisis forense en Bogotá: dos celulares, un computador portátil y una tablet.Según informó el diario El Tiempo, los equipos permanecieron durante semanas en un laboratorio del CTI, donde expertos en informática forense extrajeron una cantidad considerable de información: una tera en total. Sin embargo, hasta el momento, los resultados de ese análisis no han sido compartidos con la familia.“Solo sabemos que en el laboratorio dicen que encontraron en total una tera de información. Aún no nos han entregado los resultados, se supone que tienen que enviar esos hallazgos devuelta a la Fiscalía de Cartagena”, dijo Lucy Díaz, madre de Tatiana, al periódico.¿Qué contiene ese tera de información?De acuerdo con los investigadores citados por El Tiempo, en la copia forense de los dispositivos hay mensajes, chats, fotos y contactos que están siendo revisados cuidadosamente. La búsqueda se ha centrado especialmente en las últimas llamadas y comunicaciones que Tatiana pudo haber tenido antes de desaparecer.Los dispositivos fueron trasladados a Bogotá con el objetivo de cruzar la información digital con los testimonios recogidos por las autoridades. La esperanza es que entre esos datos pueda haber alguna pista que permita reconstruir los últimos movimientos de la joven o identificar a personas clave en su entorno.El hallazgo del segundo celularUno de los elementos que más llamó la atención en el proceso de recolección de pruebas en este caso fue el hallazgo de un segundo celular en la habitación de Tatiana Hernández tras una inspección luego de su desaparición. La existencia de este dispositivo fue confirmada por su madre a Los Informantes, quien explicó que se trataba de un aparato sin tarjeta SIM, que ella misma le había entregado a su hija tras un robo ocurrido en Bogotá.“Entonces es cuando el señor me dice que esa misma noche fueron a la habitación donde estaba Tatiana a revisar qué encontraban y encontraron su computador, su tablet. Se sorprenden porque encuentran un segundo celular. El investigador me dice, ‘¿Tiene conocimiento de que su hija utilizaba dos celulares?’ Yo le digo, ‘Sí, señor’”, relató Lucy Díaz en entrevista con la Nena Arrázola en el informativo de Caracol Televisión.Este segundo celular, aunque aparentemente no estaba en uso activo, también fue incluido en el análisis forense. Lo hallado, al igual que en el resto de los dispositivos, permanece bajo reserva.Una desaparición sin pistas clarasTatiana Hernández desapareció el domingo 13 de abril. Ese día, su madre le llevó el almuerzo al hospital donde hacía su internado. “Ella salió corriendo, me recibió el paquete y fue de afán”, contó Lucy. Horas más tarde, el novio de Tatiana, David Espitia, al no recibir respuesta a unos mensajes que le había enviado horas tardes decidió comunicarse con Sara, una compañera de ella, quien le comentó que Tatiana había salido, pero que iría a buscarla.Más tarde, David recibió una llamada de Sara quien le contaba que habían encontrado las sandalias y celular de la joven médica en los espolones, una zona costera de Cartagena donde solía caminar con sus colegas, pero no había rastro de ella, por lo cual decidió alertar a los padres de Tatiana.Desde entonces, no se ha sabido nada más de ella. La familia ha recorrido barrios, pegado volantes, organizado marchas y hablado con medios de comunicación. La angustia no ha disminuido, pero tampoco la esperanza.“Tatiana está viva, está en un lugar oculto. Tengo la esperanza y la ilusión que de pronto esté también ayudando a la gente en su estado de médico”, dijo su madre.¿Quién es el novio de Tatiana Hernández?David Espitia, abogado de 26 años, ha estado presente desde el primer momento. Al día siguiente de la desaparición, tomó un vuelo desde Bogotá y se unió a la búsqueda. “Ella va a volver y todo esto va a ser un capítulo que es una pesadilla, pero que vamos a superar todo esto”, dijo en entrevista con Los Informantes.David relató que ese día hablaron al mediodía. Tatiana le dijo que iba a estudiar y luego almorzar. Después, no volvió a responder. “Tata es una persona que es muy responsable. Si ella salía, les avisaba a las amigas o a la señora Lucy. En su defecto, también me decía a mí ‘voy a ir a tal lado’”, explicó.La Fiscalía no ha emitido comunicados oficiales sobre los avances de la investigación. La familia, por su parte, sigue aferrada a la posibilidad de encontrarla con vida.
En Colombia, los motociclistas deben cumplir con ciertas normas de seguridad establecidas por el Código Nacional de Tránsito. Y es que, de acuerdo con lo establecido en la ley 769 de 2002 y la Norma Técnica Colombiana NTC 5375, las motocicletas deben estar dotadas con todos los elementos básicos de seguridad al momento de circular por las vías del país, como las luces direccionales o el chaleco reflectivo. Incumplir estas normas puede dar multa al conductor y pueden llegar a inmovilizar el vehículo.Una de las disposiciones reglamentadas que deben seguir todos los motociclistas tiene que ver con el uso adecuado de los espejos retrovisores, un requisito legal que debe cumplirse dependiendo de la capacidad máxima de velocidad que tenga la motocicleta y por su utilidad para mejorar la visibilidad, para que de esta manera se eviten accidentes. Por lo tanto, el uso correcto de los espejos retrovisores es también importante para garantizar la seguridad del conductor, según lo establece la normativa.Las modificaciones a los espejos retrovisores que comprometan su función están prohibidas y en 2025 dan multa. Entre estas se encuentran la instalación de espejos muy pequeños, de diseño estético, pero poco útiles, o el uso de espejos que distorsionen la imagen. Estas alteraciones pueden poner en riesgo al conductor y a los demás actores viales, y también pueden derivar en sanciones por parte de las autoridades de tránsito.¿Qué dice la ley sobre los espejos retrovisores?Según lo explicado en la NTC 5375, las motocicletas deben cumplir con ciertos requisitos en cuanto a la instalación de espejos retrovisores, los cuales están regulados por el Código Nacional de Tránsito. La cantidad y ubicación de los espejos obligatorios dependen principalmente de la velocidad máxima que puede alcanzar la motocicleta, y su propósito es garantizar una adecuada visibilidad para prevenir accidentes. El número de espejos dependen de las siguientes condiciones:Motos que superan los 100 km/h: Están obligadas a tener dos espejos retrovisores, uno ubicado a cada lado del manubrio (izquierdo y derecho).Motos con velocidad máxima igual o inferior a 100 km/h: Solo es obligatorio portar el espejo del lado izquierdo. El del lado derecho se considera opcional.Además del número de espejos, también es importante tener en cuenta su estado y características. Los espejos deben ser funcionales, es decir, deben permitir al conductor ver claramente lo que sucede en la parte trasera. No deben estar rotos, sueltos, ni alterados con accesorios decorativos que afecten su utilidad. El tamaño del espejo también debe ser adecuado para proporcionar un buen campo de visión. Por lo tanto, los nuevos espejos que están de moda, como los alerón y racer, pueden generar multa, según lo determine la autoridad de tránsito. Puntualmente, la norma aclara lo siguiente: "Mediante inspección sensorial se debe comprobar: al menos dos espejos retrovisores funcionales e independientes, o cámaras que cumplan esta función, estado de las superficies o fijación deficiente de cualquier espejo retrovisor que impida o imite la funcionalidad del mismo, mal estado o fijación deficiente de los espejos", de todo automotor. Por lo tanto, los motociclistas deben estar atentos a portar los espejos retrovisores exigidos por la ley y asegurarse de que estén en buen estado, sean funcionales y que esten correctamente instalados. La multa por no llevar los espejos retrovisores adecuadosConducir una motocicleta sin los espejos adecuados o sin utilizarlos correctamente puede derivar en una infracción catalogada como C dentro del Código Nacional de Tránsito y en la ley 769 de 2002. Esta falta contempla sanciones para conductores de motocicletas que no utilicen adecuadamente elementos como las luces direccionales y los retrovisores, cuyas características están determinadas en la Norma Técnica Colombiana.La multa correspondiente a esta infracción es de 15 salarios mínimos diarios legales vigentes (SMLDV), lo cual equivale a aproximadamente $711.750 en 2025, valor que puede variar cada año según el ajuste del salario mínimo. Además de esta infracción, los motociclistas también deben tener en cuenta que hay otras conductas sancionables relacionadas con la modificación de elementos del vehículo. Por ejemplo, cambiar los espejos por versiones no reglamentarias, instalar resonadores para alterar el sonido del motor, o manipular las placas pueden derivar en sanciones aún más severas, tanto económicas como penales. Además de la multa, en ciertas circunstancias las autoridades de tránsito están facultadas para ordenar la inmovilización del vehículo, especialmente si se considera que el incumplimiento representa un riesgo para la seguridad vial.Multa por no usar chaleco reflectivo es de $700 mil en ColombiaOtra de las obligaciones que deben cumplir los motociclistas en Colombia tiene que ver con el uso de prendas reflectivas en determinados horarios o cuando las condiciones de visibilidad lo requieran. Esta exigencia ha sido reiterada por el Ministerio de Transporte, que ha citado diversas disposiciones legales para sustentarla, entre ellas los artículos 94 y 96 del Código Nacional de Tránsito (Ley 769 de 2002), así como lo estipulado en la Resolución 20223040045295.De acuerdo con estas normas, tanto los conductores de motocicletas como los pasajeros están en la obligación de portar chaleco o chaqueta con material reflectivo desde las 6:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana del día siguiente. Esta medida también aplica en cualquier situación en la que la visibilidad se vea afectada, como en caso de neblina, lluvia intensa o pasos por zonas oscuras. La intención de esta regulación es aumentar la visibilidad de los motociclistas para otros actores en la vía, especialmente en condiciones de baja iluminación, y así contribuir a la prevención de accidentes.Aunque puede parecer una norma simple, no portar prendas reflectivas en los horarios o condiciones exigidas constituye una infracción clasificada como tipo C24, según lo establece el Código Nacional de Tránsito. Esta falta conlleva una sanción económica equivalente a 15 salarios mínimos diarios legales vigentes (SMDLV). Para el año 2025, esto representa un valor aproximado de $711.750. VALENTINA GÓMEZ GÓMEZNOTICIAS CARACOLvgomezgo@caracoltv.com.co
El mundo del boxeo está de luto tras la muerte de Georgia O’Connor, una de las jóvenes promesas más brillantes del deporte en Reino Unido. La deportista profesional falleció este 22 de mayo de 2025 a los 25 años, apenas dos semanas después de casarse con su pareja, Adriano Cardinali. Lo que ha llamado la atención de la prensa internacional no solo por la edad de la mujer, sino también porque semanas atrás había denunciado negligencia médica para diagnosticar a tiempo su enfermedad.Nacida en Durham, Inglaterra, el 18 de febrero de 2000, Georgia O’Connor se destacó desde temprana edad en el mundo del deporte. Fue campeona juvenil de taekwondo y kickboxing, y más tarde se convirtió en una figura destacada del boxeo amateur, ganando la medalla de oro en los Juegos de la Juventud de la Commonwealth en 2017, además de medallas de plata y bronce en campeonatos mundiales juveniles. En 2021, dio el salto al boxeo profesional, donde mantuvo un récord invicto de 3-0, consolidándose como una de las grandes esperanzas del boxeo femenino británico.Sus primeros problemas de saludDesde 2022, O'Connor no participaba en competencias profesionales al ser diagnosticada con una colitis ulcerosa y colangitis esclerosante primaria (PSC), condiciones de salud que se fueron complicando con el paso del tiempo y que aumentaban su riesgo de desarrollar un cáncer a futuro. Así fue, el 31 de enero de este año la famosa deportista anunciaba a sus seguidores que había sido diagnosticada con un raro y agresivo cáncer, pero denunció que llevaba meses con los síntomas que, según denunció, fueron ignorados por los médicos. "Realmente no hay una forma fácil de decir esto, pero tengo cáncer. Durante 17 semanas desde principios de octubre, he estado en constante dolor", detalló la boxeadora en sus redes sociales, contando para pasó tres meses visitando una y otra vez a los médicos por su situación. Aseguró que sospechaba que se trataba de cáncer por sus condiciones de salud previas, pero que cuando se lo comentó a los médicos y pidió que le hicieran los exámenes, estos desestimaron sus sospechas."Desde el principio, dije que sentía que era cáncer. SABÍA los riesgos. Tengo colitis y PSC, dos enfermedades que aumentan drásticamente las posibilidades de tenerlo. Sé cuán alto es mi riesgo y ellos también lo saben. Siempre lo supieron. Pero ningún médico me escuchó. Ningún médico me tomó en serio. Ningún médico hizo las exploraciones o análisis de sangre que pedí mientras lloraba en el suelo de agonía. En cambio, me desestimaron. Me hicieron dudar de mí misma, me dijeron que no era nada y me hicieron sentir que estaba exagerando. Se negaron a hacerme un escáner. Se negaron a investigar. Se negaron a escuchar. Uno incluso me dijo que todo estaba 'en mi cabeza'".O’Connor dejó ver su frustración por la falta de atención médica adecuada, destacando que sus síntomas fueron minimizados y que no se le realizaron las pruebas necesarias a tiempo. En medio de su lucha contra la enfermedad, Georgia encontró consuelo en su vida personal. El 9 de mayo de 2025, se casó con su pareja, Adriano Cardinali, en una ceremonia íntima. En su última publicación en Instagram, compartió una foto de sus manos entrelazadas con sus anillos de boda y un ramo de rosas blancas, expresando su amor y gratitud hacia su esposo por su apoyo incondicional durante su enfermedad .La noticia de su fallecimiento ha generado una ola de condolencias en la comunidad del boxeo. La promotora BOXXER, con la que estaba vinculada, la describió como una "verdadera guerrera dentro y fuera del ring, la comunidad del boxeo ha perdido a una joven talentosa, valiente y decidida demasiado pronto". El boxeador Michael Conlan también rindió homenaje a O’Connor, calificándola como "una hermosa alma que se fue demasiado pronto".Georgia O’Connor deja un legado de valentía y determinación, no solo por sus logros en el ring, sino también por su lucha contra la enfermedad y su denuncia de la negligencia médica. Su historia ha generado un llamado a la reflexión sobre la importancia de escuchar y atender adecuadamente las preocupaciones de los pacientes, especialmente aquellos con condiciones de salud preexistentes.MARÍA PAULA GONZÁLEZPERIODISTA DIGITAL DE NOTICIAS CARACOLCORREO: mpgonzal@caracoltv.com.co
El comando del Ejército acaba de relevar de su cargo a cinco oficiales, entre ellos el comandante de la Brigada 22 de selva, tras el asesinato de siete soldados en Guaviare a manos de las disidencias de alias Calarcá. Desde que ocurrió la emboscada, el pasado 26 de abril, la inspección del Ejército Nacional llegó a la zona para revisar la ejecución de las operaciones y su planeación, con el fin de determinar si hubo o no fallas o evasiones que pudieran incidir en el ataque, en el que también secuestraron a otros cinco uniformados.La inspección emitió las recomendaciones y dentro de ellas está el relevo del cargo del comandante de la brigada 22, el coronel Néstor Augusto Corso, y de otros cuatro uniformados más: el oficial de operaciones de esa brigada, el jefe de Estado Mayor, el comandante del Batallón París y el comandante de operaciones de esa Unidad Militar.Así fue el ataque en Guaviare, en el que murieron 7 militaresEl ataque ocurrió en la madrugada del pasado 27 de abril en Charras, una vereda donde un pelotón del Batallón de Infantería No. 19 Joaquín París, "fue emboscado y atacado" por integrantes del grupo armado ilegal Jorge Suárez Briceño, que hace parte del Estado Mayor de Bloques (EMB) de las disidencias de las Farc y con el que el Gobierno tiene negociaciones de paz. Los militares estaban encargados de la seguridad del Antiguo Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (AETCR) de Charras, usado por exguerrilleros de las Farc que se acogieron al acuerdo de paz de 2016. Los militares que fallecieron eran el sargento viceprimero Darwin Pérez Sánchez y los soldados profesionales Jairo Arteaga Estrada, Anderson Steven Bohórquez Ospina, Juan David González Fernández, Carlos Andrés Pushaina Pushaina y Moisés David Cuadros Ruiz.A los uniformados que retuvieron durante varias horas, los grabaron mientras los intimidaban y se burlaban de su difícil situación. “Una foto para el face”, dijo uno de los criminales. "Eso representa una traición a esos compromisos para transformar el territorio hacia la paz, pero también un crimen atroz, un delito muy grave frente a la Constitución Política y la ley colombiana. Asesinar a un militar o a un policía es un grave delito", dijo en su momento el ministro de Defensa, Pedro Sánchez.Los sobrevivientes son: comandante cabo tercero Peña Patiño y los soldados Eddy Neiva Saavedra, Ricardo Hernández Suárez, Duver Felipe Gutiérrez Vargas y Yurge Finca Pushaina."Los militares que fueron atacados hacen parte de la seguridad que se le da a un ETCR de miembros que se acogieron al proceso de paz en 2016 de las extintas Farc. Lo que hay ahorita es disidencias que intentan utilizar ese nombre", resaltó el ministro de Defensa. Aseguró que "la guerra y el conflicto también tienen sus límites y estos criminales los violan".LAURA VALENTINA MERCADONOTICIAS CARACOL DIGITAL lmercado@caracoltv.com.co
Juan Carlos Osorio sonó durante la presente semana en medios mexicanos, como uno de los fuertes candidatos para convertirse en entrenador de Chivas de Guadalajara. Algunos periodistas lo dieron como cercano hace un par de días, sin que se dieran avances significativos.Con ese panorama, este jueves apareció una nueva versión en 'Fox Sports', en donde el periodista Rubén Rodríguez dejó un manto de duda e inquietud con respecto al experimentado técnico colombiano.“Qué bueno que la gente de Chivas nos escuchó, que preguntaron, porque lo de Osorio se enfrió. Lo digo con mucho respeto, Osorio no debería estar dirigiendo en el futbol mexicano por lo que hizo en Tijuana, son cosas extracancha muy delicadas. Ojalá que las afectadas y afectados tengan el valor de dar el siguiente paso”, explicó inicialmente el referido comunicador.Rodríguez también agregó que “me parece increíble que la gente que contrató a Osorio no hiciera algo más, es una lástima. Como técnico, lo que quieras; yo hablo de temas totalmente extra cancha”.Sin embargo, no se fue exacto en la información, no se dieron pistas del supuesto inconveniente que se le presentó al profesional risaraldense.De inmediato, vinieron todo tipo de comentarios y reacciones en las redes sociales, solicitando que se entregara la noticia completa, con adeptos y detractores del colombiano.Gol Caracol estuvo intentando tener contacto con el profesor Osorio para conocer alguna reacción suya al respecto, pero no contestó los mensajes.Juan Carlos Osorio, con altibajos como DT de XolosLo más reciente de Juan Carlos Osorio en el balompié 'manito' fue sentado en el banquillo de Xolos de Tijuana, con el que tuvo puntos altos en el segundo semestre de 2024, aunque ya en el presente año el equipo se vino a menos y en el mes de marzo pasado terminó marchándose del club.Sin embargo, no se presentaron polémicas, ni declaraciones explosivas de ninguna de las dos partes.
En Manizales, Caldas, se encuentran de luto tras la muerte repentina de un joven de 23 años, quien falleció después de caer desde una teja intentando salvar a su gato. El hombre se llamaba Juan José Medina Triana y era oriundo de Buga, municipio del Valle del Cauca, por lo que era conocido como 'Buga' o 'Buguita'. La primera hipótesis de los hechos señala que la mascota de Medina Triana se había extraviado. Al encontrar al gato sobre el tejado, el joven, al parecer, intentó salvarlo, pero lastimosamente cayó sobre la casa contigua a su vivienda, desde el tercer piso. El golpe fue tan contundente que, casi de inmediato perdió la vida, en la noche del pasado miércoles 21 de mayo. El incidente ocurrió en la Calle 48D con carrera 20, una zona residencial. Por el momento las autoridades no han dado más detalles de la muerte del joven de 23 años. Mientras tanto, en redes sociales han dedicado sentidos mensajes de despedida para 'Buguita', recordado por ser una persona atenta y un gran amigo. Medina Triana estaba estudiando Ingeniería Industrial en la Universidad Autónoma de Manizales (UAM). Así despiden a Juan José Medina TrianaLa UAM lamentó el fallecimiento del estudiante por medio de sus redes sociales: “Con profundo pesar y dolor, la comunidad de la Universidad Autónoma de Manizales (UAM) manifiesta sus condolencias por el lamentable fallecimiento de su estudiante. Enviamos un mensaje de condolencia a su familia en este difícil momento”. Asimismo, el Colegio Mayor Ciudad de Buga, donde estudió el joven también lamentó lo sucedido: "La comunidad Educativa del Colegio Mayor Ciudad de Buga y en su nombre la Especialista Luz Mary Giraldo Montoya y el Administrador Educativo Mario Fernando Correa Marín, lamentan profundamente el sensible fallecimiento de uno de nuestros más queridos egresados Juan José Medina Triana, hijo de una familia amiga de nuestra institución".El medio local La Patria habló con varios de sus conocidos, quienes recuerdan a 'Buguita' con cariño. "Muy comprometido con su estudio y sus labores. Pero más allá de eso, Buga fue un cómplice de vida en la lides del bienestar y el arte, su capacidad de servicio y entrega, su humanismo, generosidad y sencillez llevaban a sus compañeros por un sendero de confianza y fe. Participaba de diversos grupos y motivaba con su sonrisa a que otros hicieran parte de ellos: líderes, foráneos, escritores, teatro y otros. Un privilegio que ahora aguarda otro sendero. La huella de 'Buga' será imborrable", afirmó Néstor Piedrahíta, coordinador de la Unidad de Arte y Cultura de la UAM.Por su parte, Diana Perea, coordinadora de la Unidad de Bienestar de la UAM, resaltó el liderazgo del estudiante fallecido. "Cuando se organizaban comparsas universitarias, muchas veces convocó los grupos, lideraba toda la propuesta. Fue un líder de los foráneos, nos acompañó en diferentes salidas, creando redes de apoyo para los que no eran de la ciudad, atento siempre a apoyarlos y servirles. Se destacó por su actitud frente a dar ideas e innovar. Fue candidato a representante estudiantil, y aunque no quedó, siguió contribuyendo. Alegre, dispuesto, inteligente, de ideas y con gran sentido de pertenencia a la U y a todos los procesos de los estudiantes. Muy buen hijo, pendiente de su hermana menor. Una gran pérdida", indicó al medio citado.LAURA VALENTINA MERCADONOTICIAS CARACOL DIGITAL